Susana Giménez se dio el gusto de recibir en su living a una de las figuras más importantes del espectáculo argentino. “ Ella es una mega estrella, una mega amiga y una diva total”, presentó y, enseguida, de impecable vestido turquesa, hizo su ingreso al estudio la señora Mirtha Legrand.
La charla, distendida, cómplice, intima y valuada en 22.8 puntos de rating, recorrió la vida de la mujer que inmortalizó su imagen detrás de una mesa en la pantalla argentina cada mediodía desde hace ya varias décadas. Su trayectoria, Juanita y Nacho, la pequeña Ámbar, los amigos, su gran amor Daniel Tinayre y luego la soledad, esa eterna soledad.
Tinayre, siempre Tinayre. “Cuando se fue Daniel me puse melancólica. Yo nunca había estado sola y aquello era la soledad. Llegar a casa sola...” reflexionó Mirtha, y destacó la compañía que significa hoy en su vida su hija Marcela.
“Daría cualquier cosa por tener a Daniel Tinayre y pelearme otra vez con él”, largó la señora en una expresión de deseo y melancolía por aquel hombre que marcó su vida y por el cual nunca volvió a formar pareja.
Sin embargo, la “ Chiqui” no perdió oportunidad para destacar sus logros amorosos antes de conocer al padre de sus dos hijos. “Me he enamorado y se han enamorado mucho de mi” repasó, para luego recordar que a su novio anterior a Daniel lo dejó porque no le gustaba que trabajara en la industria del espectáculo.
Una vida dedicada al espectáculo. “Aparte de mis hijos mi logro es el perdurar a través de los años. No es común que una figura perdure y siga contando con el apoyo del público”, se jactó Legrand, que todos los diciembres anuncia su retiro y todos los marzos vuelve a comenzar su mítico ciclo en TV.
“ Yo soy una mujer grande, la gente me quiere y mi físico está bien. Agradezco al cielo lo que la vida me ha dado. Estar vigente a mi edad, es único en el mundo”, expresó la diva de los almuerzos, uno de los personajes de la farándula argentina con más trayectoria y vigencia.
Susana, impresionada por la vigencia y la sagacidad de “Chiquita” Legrand, no pudo más que hacer el intento de indagar sobre la fórmula del éxito. “Me impresiona lo sagaz que sos, la fuerza que tenés. ¿ Tomás ácido fólico?”, disparó la rubia
