En la rutina diaria solemos pensar en proteger nuestros bienes materiales, esos que tanto nos costó conseguir. Sin embargo, muchas veces olvidamos resguardar lo más importante: nosotros mismos. Nuestra vida, nuestra salud y nuestra tranquilidad también necesitan un respaldo.
El seguro por accidentes personales es una herramienta clave, tanto para profesionales independientes como para quienes realizan tareas de esfuerzo físico. Incluso si contratamos a alguien para una reparación en casa, podemos solicitarle que tenga cobertura o, en su defecto, gestionarla nosotros mismos por el tiempo que dure el trabajo. Una medida simple que brinda paz y seguridad.
Por su parte, el seguro de vida —obligatorio para trabajadores registrados— también puede ser contratado por independientes. Esta cobertura significa proteger a nuestra familia ante lo inesperado. En caso de una partida temprana, ofrece un sostén económico que ayuda a transitar un momento difícil hasta que puedan reacomodarse. Porque amar también es prever.
El seguro de retiro, en tanto, cumple varias funciones. Puede ser un respaldo ante gastos médicos o emergencias, un complemento de ingresos en la jubilación o incluso una reserva para cumplir proyectos familiares, como financiar estudios en el exterior de un hijo. Más que un gasto, es una inversión en calidad de vida futura.
Mirar estos seguros —de accidentes, de vida y de retiro— como una inversión en nosotros y en quienes amamos es un acto de previsión que da tranquilidad y confianza. Contar con compañías serias y con respaldo asegura que cada aporte crezca y se convierta en un verdadero sostén para el mañana.
Cuidarnos hoy es proyectar un futuro más tranquilo. Invertir en seguros es proteger lo más valioso: nuestra vida, nuestra familia y nuestros sueños.
Contacto
- Celular: 2656 406053
- Fijo: 02656 470974
- Email: [email protected]
Esta nota no solo busca informar, sino también crear conciencia sobre la importancia del seguro en nuestras vidas.