Estar al tanto de las noticias es tan importante como prestar atención a nuestro capital personal. Saber qué bienes tenemos, cuánto valen, y reconocer el esfuerzo que nos costó conseguirlos y mantenerlos, es una forma de protegernos.
Es valorar nuestra calidad de vida y también a quienes la comparten con nosotros: nuestra familia. Cuidar lo que tenemos es, en el fondo, cuidarlos a ellos.
La vida es movimiento constante. Por eso, muchas personas eligen contratar un seguro como una herramienta de protección frente a lo inesperado. Incluso quienes tienen un gran patrimonio no dejan sus bienes librados al azar: planifican.
Y ese plan se basa en tres pilares:
- Una buena organización de los gastos.
- Planificación de los ingresos según el estilo de vida.
- Y el respaldo de un seguro: de vida, para que tu familia esté cubierta si te pasa algo; de hogar, para reconstruir lo que el fuego o un desastre pueda dañar; de auto, no solo ante un robo, sino también por posibles incendios (hoy los vehículos incorporan muchos materiales inflamables); o un seguro para electrodomésticos, que proteja frente a tormentas eléctricas o explosiones.
Estos bienes son parte de lo cotidiano, y muchas veces no reparamos en el valor económico y práctico que tienen. Por eso, es clave declararlos bien en la póliza y actualizar sus valores cada cierto tiempo.
Si tenés un negocio o empresa, también podés protegerla. Es tu fuente de ingreso diario y cuidarla es cuidarte a vos.
Un Productor Asesor de Seguros puede acompañarte en este proceso. Tiene el conocimiento y las herramientas necesarias para brindarte la mejor protección según tu caso. Porque como dice el dicho: “Escuchar es el arte de crecer, por la reflexión que lográs”.
Y además, el beneficio más grande es la tranquilidad: te permite pensar con más claridad, valorar tu esfuerzo y cuidar lo que realmente importa.
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Esta nota no solo busca informar, sino también crear conciencia sobre la importancia del seguro en nuestras vidas.