El presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue asesinado el miércoles 7 de julio en su casa por un comando integrado por personas extranjeras, anunció el primer ministro saliente, Claude Joseph.
La esposa del presidente resultó herida en el ataque y fue hospitalizada, dijo Joseph, quien pidió calma a la población y aseguró que la policía y el ejército se encargan de mantener el orden.
El asesinato del presidente de Haití: quién era Jovenel Moïse
Alrededor de la una de la madrugada, un grupo de individuos aún desconocidos, "algunos de los cuales hablaban español", atacaron la residencia privada del mandatario y lo hirieron de muerte, indica el documento oficial que emitió el gobierno de Haití tras el hecho.
"Un acto inhumano", dijo el primer ministro de Haití
Mientras tanto, el primer ministro interino y la Policía Nacional han condenado "este acto odioso, inhumano y bárbaro", al tiempo que han llamado a la población a la calma, afirmando que la situación de seguridad en el país "está bajo el control" de la Policía y de las Fuerzas Armadas.
"Se toman todas las medidas para garantizar la continuidad del Estado y para proteger a la Nación", asegura el comunicado, para concluir que "la democracia y la República ganarán".
Moïse ha gobernado el país más pobre de América por decreto desde hace más de un año, en medio de una crisis política y disputas sobre cuándo terminaba su mandato. El presidente ha sido acusado de inacción frente a la inseguridad y una ola de secuestros en los últimos meses, en una nación que también afronta pobreza crónica y desastres naturales recurrentes, además de la pandemia de coronavirus.
En declaraciones al diario El País, Moïse había justificado su decisión de sostenerse en la presidencia de Haití hasta el llamado a elecciones, de las que había prometido no participar.
LC/FL