Luego de muchas idas y vueltas y con opiniones dispares en el pueblo chileno, la presidenta Michelle Bachelet logró promulgar la ley sobre regulación de fertilidad, que entre otros aspectos, permitirá la distribución gratuita en los servicios públicos de la píldora del día después.
La ley debió transitar un largo debate en el Congreso trasandino, hasta que finalmente el pasado 6 de enero la normativa fue aprobada por la Cámara Baja, luego enviada al Tribunal Constitucional, que finalmente lo declaró constitucional el pasado jueves, quedando lista para su promulgación.
“Creo que es un gran avance nuestro país. Esta ley no obliga a nadie a que vaya contra sus principios de ética. Entrega libertad a las mujeres, dándoles la posibilidad de elegir por si y para si. Toda persona tiene derecho a elegir libremente de acuerdo a sus creencias o formación que métodos de regulación de la fertilidad femenina y masculina usará”, aseguró Bachelet durante el discurso.
Según se explica en el portal chileno de Terra, junto con permitir la entrega de la píldora del día después, la ley de "información, orientación y prestaciones en materia de regulación de la fertilidad", exige que los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado incluyan en la Enseñanza Media un programa de educación sexual, con contenidos que se apeguen a una sexualidad responsable y que informen sobre métodos anticonceptivos existentes.
“Con la promulgación de esta ley estamos corrigiendo una tremenda injusticia. Las mujeres chilenas hemos dado un nuevo paso que nos hace más libres”, finalizó la mandataria chilena.