Ballotage en Chile: entre Frei y Piñera

Chile inició hoy su votación para elegir entre el derechista Sebastián Piñera y el socialdemócrata Eduardo Frei al sucesor de la presidenta Michelle Bachelet, en una elección que se prevé muy reñida y que puede significar el primer triunfo en las urnas para la derecha en más de 50 años.

Unos 8,3 millones de chilenos están habilitados para votar en esta jornada, en que las urnas se abrieron a las 07 de la mañana (hora chilena) en total calma en todo el país y se cerrarán nueve horas más tarde.

Piñera, un millonario de 60 años, encabeza una coalición de derecha que tiene una real opción de imponerse y alcanzar para esa tendencia política la primera victoria en las urnas desde Jorge Alessandri en 1958.

Frei, de 67 años y quien ya fue presidente entre 1994 y 2000, tiene como desafío darle continuidad a 20 años de gobiernos de la Concertación (Lea la columna de hoy de Rafael Bielsa), una coalición de cuatro partidos de centro izquierda en el poder desde el final de la dictadura de Augusto Pinochet en 1990.

Ambos llegaron a la votación de este domingo en situación de empate técnico, según el último sondeo conocido el miércoles, de la consultora Mori, que le dio a Piñera un 50,9% frente a un 49,1% de Frei, con un margen de error de un 3%, lo que impide anticipar un triunfador.

Piñera tenía una ventaja relativamente holgada tras haber derrotado en la primera vuelta a Frei (44% contra 30%) y con encuestas a comienzo de enero que le otorgaban una diferencia favorable de entre 5 y 6%, pero el último sondeo cambió totalmente el panorama y le inyectó una dosis de entusiasmo al oficialismo.

Aunque el optimismo en la derecha se ha transformado en nerviosismo, la mayoría de analistas considera que Piñera tiene aún una mejor opción, aunque sin poderlo asegurar de manera categórica. Desde el miércoles, cuando se conoció esa encuesta (a lo que se sumó el apoyo a Frei del independiente Marco Enríquez-Ominami, quien en primera vuelta sacó 20% de la votación) el clima de la campaña cambió por completo tornándose más ríspido.

A eso contribuyó también la presidenta Michelle Bachelet, ya bastante comprometida en favor de Frei -al igual que muchos funcionarios- quien en una entrevista radial cuestionó que Piñera no se hubiera desprendido de algunas de sus empresas antes de postular, y habló de incompatibilidades evidentes entre ser empresario y ser presidente.

Esta declaración generó la ira del millonario, quien señaló que "es abusivo lo que ha hecho el Gobierno, uso y abuso de los recursos públicos, de las instituciones públicas e incluso de los funcionarios públicos". También señaló que a la gente de la Concertación no le haría mal salir del poder para "vivir la vida normal" y "trabajar en forma honesta".

"No corresponde que una persona que aspira a ser presidente de la República, se refiera a los funcionarios públicos, que trabajan y se levantan temprano y son muy honestos, de esta manera", le respondió el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, quien exigió que Piñera se disculpara.

Frei, un candidato que se ha definido a sí mismo como un político aburrido, parece haber recuperado el talante y el buen humor en los últimos días. El ex presidente se ha comprometido a mantener la obra de la presidenta Bachelet -que sale del poder con 80% de aceptación-, mientras que Piñera quiere enfocar su esfuerzo a un cambio que lleve al país a crecer más y a tener un millón más de empleos, cuando la tasa de desempleo está cercana al 10%.

Tan reñida se presenta la elección que en las últimas horas los esfuerzos de las campañas se han centrado en garantizar que en cada unas de las 35.000 mesas puestas a disposición de los votantes haya delegados para evitar que se presenten irregularidades. El gobierno señaló que hacia las 19 (hora chilena) habrá una primera estimación oficial, confiando en que el resultado final esté a la medianoche del domingo.

Fuente: AFP.