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Beijing
El Ministerio de Defensa chino denunció ayer “una grave provocación militar” tras el vuelo la semana pasada de un bombardero estadounidense B-52 sobre islotes artificiales en el mar de China, cuya soberanía reivindican Beijing y varios de sus vecinos.
“El 10 de diciembre por la mañana, dos bombarderos estadounidenses B-52 entraron sin autorización en el espacio aéreo de las islas chinas Nan-sha y de aguas territoriales adyacentes”, indicó el ministerio aludiendo al nombre en chino de las islas Spratleys.
“Este comportamiento representa una grave provocación militar, que complica la situación general en el mar de China meridional” y que contribuye “a la militarización de la región”, acusó el ministerio de Defensa chino.
Para el gobierno chino, “hace tiempo que Estados Unidos envía de forma incesante aviones de guerra al espacio aéreo del mar de China del sur para demostraciones de fuerza y atizar tensiones”, añade el ministerio, y advierte que el ejército chino “tomará las medidas necesarias para defender la soberanía y la seguridad del país”.
Otra versión. Según el Wall Street Journal, que citó fuentes del Pentágono, durante una misión de dos B-52 la semana pasada, uno de los dos aparatos se acercó a menos de dos millas marinas de un islote artificial construido por China en un arrecife de las Spratleys, supuestamente debido a malas condiciones meteorológicas.
El avión se “desvió de su ruta, sin tener la intención”, quizás a causa de las malas condiciones climáticas, había precisado el diario.
Ayer, el Pentágono afirmó que investiga el incidente. “Los chinos nos informaron su preocupación sobre la trayectoria de vuelo de una misión reciente. Nos estamos informando”, dijo el portavoz, Mark Wright.
“También puedo decirles que para esta misión no había la intención de volar a menos de de doce millas náuticas de cualquier instalación”, agregó.
Obama y sus logros este año
Barack Obama hizo ayer una lista con los diez mayores “logros” de su país en 2015, entre ellos los avances hacia la normalización de relaciones con Cuba, la legalización del matrimonio gay y los acuerdos alcanzados con el Congreso que permitieron aprobar su presupuesto, lo que fue “un verdadero milagro de Navidad”. En su mensaje semanal, Obama, que comenzó sus vacaciones en Hawai junto a su familia, dijo que los estadounidenses deberían “sentirse optimistas para 2016”. Sobre la legalización del matrimonio gay, afirmó: “El amor ganó. Independientemente de quién sea usted, aquí, en Estados Unidos, tiene la libertad de casarse con la persona que ama. Porque la libertad de casarse es ahora una ley en todos los cincuenta estados”, concluyó el mandatario.
