El fundador y máximo líder de la organización maoísta "Sendero Luminoso", Abimael Guzmán, y su
pareja, Elena Iparraguirre, fueron condenados hoy por un tribunal de Perú, a cadena perpetua por
los delitos comprobados de "terrorismo agravado" y homicidio calificado.
La Sala Penal Nacional para Casos de Terrorismo también condenó a penas de entre 24 y 35 años
de cárcel a otros integrantes de la cúpula del grupo guerrillero, lo que generó cuestionamientos de
algunos funcionaros y abrió una polémica en los medios locales.
Detenido en 1992, Guzmán, ya había sido condenado por un tribunal militar en 1993, pero la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos cuestionó aquel proceso y ordenó otro a cargo de jueces
civiles.
El histórico líder senderista que hoy tiene 71 años y su pareja escucharon la sentencia sin
inmutarse, junto a otros 10 lugartenientes de esa organización.
Guzmán encabezó la más cruenta rebelión armada que vivió Perú, desde mayo de 1980, y causó la
muerte a más de 30 mil personas y pérdidas materiales por más de 25 mil millones de dólares.
Los principales mandos de Sendero fueron juzgados por atentados y asesinatos selectivos
cometidos entre 1980 y 1992, entre los que se encuentran la matanza de 69 campesinos en la
localidad andina de Lucanamarca y la captación y adoctrinamiento de simpatizantes a través de una
academia preuniversitaria.
El fallo se dictó en la base naval Callao, cercana a Lima, luego de un año de proceso durante
el cual Guzmán e Iparraguirre, número dos de Sendero, prefirieron guardar silencio con el argumento
de que se les procesa con leyes que no les corresponden.
Laura Zambrano y Maria Pantoja, fueron sentenciadas a 35 años de prisión, mientras que la
pena de 25 años fue impuesta a Margie Clavo, Martha Huaytay, Angelica Salas y Osman Morote, entre
otros colaboradores de Guzmán.
Oscar Ramírez Durand, quien durante el proceso fue el único que se arrepintió por la muerte
de las víctimas y criticó a Guzmán por llevar al país a un "baño de sangre" para satisfacer sus
apetitos personales, fue sentenciado a 24 años de prisión.
Cómo era la organización. Sendero Luminoso era una facción
del Partido Comunista del Perú que optó por el camino de las armas y emprendió en 1980, tras 12
años de preparación clandestina, una "guerra popular", en la que usó medios que hicieron que un
foro de la ONU lo considerara la "organización más sangrienta del Hemisferio Occidental".
El grupo realizó una serie de acciones violentas sin antecedentes en la lucha armada de
América Latina, al amparo del "Pensamiento Gonzalo", como llamaban a la ideología de Guzmán,
autoproclamado "cuarta espada del marxismo", tras Karl Marx, Vladimir Lenin y Mao Tse Tung.
Desde la captura de Guzmán, en 1992, Sendero entró en un marcado declive hasta quedar
limitada en la actualidad a células aisladas que operan en la selva. En cuanto a la polémica que
generaron las condenas a los demás integrantes de la cúpula senderista, las críticas llegaron de
legisladores, funcionarios judiciales y hasta los mismos medios.
Defendió el fallo el presidente de la Sala Penal Nacional para Casos de Terrorismo, Pablo
Talavera, a cargo del proceso, quien afirmó que no se procedió con benevolencia, sino que se
aplicaron las penas máximas que permite la ley.
"Estoy tranquilo con mi conciencia. Estamos convencidos que la sentencia es adecuada y
fundamentada en la ley y creo que será confirmada aquí por la Corte Suprema y fuera del país",
subrayó Talavera a la radioemisora limeña CPN.
El magistrado explicó que si no se aplicó a todos los procesados la cadena perpetua es porque
la Fiscalía y la Procuraduría no acreditaron fehacientemente las responsabilidades en hechos
criminales concretos y no se podía aplicar con retroactividad la referida pena que rige desde mayo
de 1992.
Del otro lado, el procurador para casos de terrorismo Guillermo Cabala juzgó "blandengue" la
sentencia, se manifestó "preocupado y desilusionado" y advirtió que muchos de los procesados podrán
salir en libertad en pocos años en virtud a los beneficios penitenciarios.
"La situación es preocupante porque se trata de una organización criminal fundamentalista que
no es posible que pueda resocializarse", precisó Cabala.