El sospechoso de la desaparición de Madeleine McCann habría secuestrado a otra niña días unos días antes
Christian Brueckner, de 47 años, habría raptado y agredido sexualmente de una menor en abril de 2007, hecho que habría registrado con su cámara de video.
En junio de 2020 Christian Brueckner fue declarado como el principal sospechoso de la desaparición de Madeleine, hija de dos médicos británicos, pero niega su participación en el caso. |
CEDOC
Christian Brueckner, el principal sospechoso en el caso de Madeleine McCann, habría secuestrado a otra niña días antes de la desaparición de la menor británica en Pria da Luz (Portugal). Sumado a esto, distintos registros judiciales indicaron que el hombre también es sospechoso de otros abusos sexuales cometidos cerca de la zona donde Maddie fue vista por última vez en 2007.
Según informó The Sun, documentos judiciales informaron que Brueckner, de 47 años, secuestró y agredió sexualmente de una niña en la playa. El hecho, que ocurrió en abril de 2007, tuvo lugar alrededor de las 15:30. En esa oportunidad, el hombre habría esperado a la víctima en el sitio para luego raptarla y forzarla a realizar actos sexuales con él.
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Los archivos revelaron también otro presunto ataque que sucedió en algún momento entre diciembre de 2000 y abril de 2006, a menos de dos kilómetros de donde Madeleine desapareció. En este caso, la víctima fue una adolescente de 14 años que, según describía el documento, estaba atada a un poste en su casa alquilada en Portugal. Brueckner está acusado de golpearla con un látigo y obligarla a realizar actos sexuales con él, supuestamente grabando la agresión con su cámara.
La acusación más reciente data del 11 de junio de 2017. A las 2 de la madrugada de esa jornada, el sospechoso habría hecho "contacto visual" con un niño en el patio de un festival folclórico. Luego habría expuesto sus genitales y comenzado a "darse placer a sí mismo". La alarma saltó cuando el menor corrió hacia su padre en busca de ayuda, lo que terminó en el arresto de un ciudadano por parte de un policía fuera de servicio.
Christian Brueckner (45) tiene por delante un juicio por cinco delitos sexuales cuya sentencia podría dejarlo al borde de nuevas condenas.
Sin embargo, no todas sus víctimas son menores de edad. En ese sentido, en un expediente judicial se lee: "En un día indeterminado entre el 28 de diciembre de 2000 y el 8 de abril de 2006, el acusado habría sorprendido a una mujer desconocida, de aproximadamente entre 70 y 80 años, en su apartamento de vacaciones en el Algarve". El hombre, que estaba enmascarado, habría atado a la víctima para luego violarla y golpearla con un látigo.
Los documentos judiciales también detallan el caso de la irlandesa Hazel Behan, quien afirmó que Brueckner la violó en su apartamento en Portugal el 16 de junio de 2004. "Sobre las 3 de la madrugada, el acusado accedió al apartamento de una joven a través del balcón. El acusado enmascarado la despertó con un cuchillo y la violó varias veces. También azotó a la herida antes de huir por el balcón. El acusado también grabó en vídeo partes de este acto", detalla la causa.
Asimismo, se le atribuye el asesinato en 1996 de Carola Titze, una adolescente de tan solo 16 años, en De Haan, Bélgica. Finalmente, está vinculado con la desaparición de Inga Gehricke, de cinco años, en 2015.
Brueckner quedó involucrado como sospechoso en el caso de Madeleine en 2017 cuando se constató que vivía en una caravana cerca de Praia da Luz, donde se alojaban la menor y su familia cuando desapareció. Sumado a esto, estando con un amigo, alardeó respecto de la investigación sobre Maddie y hasta confesó ser el responsable de dicho secuestro. Quien se encontraba con él decidió alertar a la policía local, que procedió a detenerlo inmediatamente y sin interrogatorio previo, a fines del año 2019.
En el pasado, Brueckner fue acusado de una serie de crímenes sexuales contra mujeres y niños, incluidas múltiples violaciones. Por ese motivo, será juzgado por cinco ataques distintos que tuvieron lugar en toda Europa entre 2000 y 2017. Sobre el hombre ya había pesado una condena de 7 años por el robo y abuso de una anciana de 72 años.
