China lanzó hoy por primera vez una sonda a la Luna. Un cohete del tipo Larga Marcha 3 con el satélite orbital Chang'e 1 despegó hoy del centro de vuelos espaciales de Xichang, en la provincia de Sichuan. Circundará la Luna durante un año tomando fotografías tridimensionales del satélite terrestre, realizará mediciones y estudiará la superficie y sus reservas minerales.
El vuelo de reconocimiento constituye el primer paso de un ambicioso programa espacial chino que prevé el alunizaje de un vehículo dentro de cinco años. En su tercera fase, en el año 2017, se transportarán a la Tierra de muestras de suelo y piedras lunares.
El objetivo a largo plazo es la posible explotación de la energía y los minerales del satélite terrestre. La sonda debe su nombre a la bella diosa Chang'e, que según la leyenda china vive en la Luna junto a su liebre.
El lanzamiento es una nueva demostración del reciente resurgimiento del interés por la Luna 35 años después del último alunizaje del Apollo 17 de Estados Unidos y los expertos ya especulan con una nueva carrera espacial.
Japón se convirtió en el primer país asiático que envía su propia sonda hacia la Luna. India y Estados Unidos tienen previstos lanzamientos similares el año próximo, y los alemanes quieren dirigir su propia expedición lunar en 2012.
La investigación del material lunar es "uno de los motivos por los que vamos a la Luna", dijo el científico Qiao Xiaolin, del programa lunar chino. En particular mencionó diferentes minerales y las reservas lunares del isótopo helio-3, que podría ser un importante combustible para futuras centrales nucleares.
China fue en 2003 la tercera nación del mundo -después de Estados Unidos y Rusia- en enviar con sus propios recursos un astronauta a la Luna. Representantes del programa espacial chino insisten que sus objetivos son exclusivamente pacíficos a pesar de la preocupación internacional que despertó el derribo con un misil desde la Tierra de un satélite meteorológico obsoleto en enero pasado.
La sonda lunar Chang'e girará alrededor de la Tierra antes de partir en su viaje de 380.000 kilómetros hasta la Luna, adonde se prevé que llegará el 5 de noviembre. Circundará la Luna durante un año tomando fotografías tridimensionales del satélite terrestre, realizando mediciones y estudiará la superficie y reservas minerales con un aparato de microondas.
A su llegada, la nave reproducirá para la Tierra el himno nacional "Oriente es rojo" y canciones patrióticas como "Amo a mi China". El entusiasmo de los chinos por su programa espacial es grande. Algunos expertos no descartan que envíe una nave tripulada al satélite en unos 15 o 20 años.
El Diario Popular del Partido Comunista escribió: " Tarde o temprano ondeará sobre la Luna la grandiosa bandera roja con las cinco estrellas, y el día en que el sueño del pueblo chino se hará realidad no está lejos".
Fuente: DPA