Caracas - El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, aseguró que la llamada telefónica que realizó la senadora Piedad Córdova al general colombiano Mario Montoya, en la que él participó, fue una tontería aprovechada para convertirla en una cuestión de Estado y derrumbar el acuerdo humanitario.
"Alguien puede pensar que yo estaba impulsando desconocer al presidente (de Colombia, Alvaro) Uribe (...) no le propuse dar un golpe de Estado, ni reunirnos, fue un saludo nada más", dijo Chávez, quien lamentó que de esta manera se truncara el camino hacia el intercambio humanitario y, más allá, un acuerdo de paz.
El mandatario venezolano, citado por la agencia ABN, fustigó a los medios de comunicación que aprovechan este tipo de situaciones "para dar carne a la carroña. Dicen que la causa del cese (del acuerdo) es que yo habría violado la soberanía colombiana".
Chávez explicó que había acordado en Santiago de Chile con Uribe, que el mandatario colombiano hablaría con sus militares porque de hacerlo él "los volvería chavistas", según las propias palabras de Uribe.
También destacó que desde el inicio del proceso, cuando fue designado como mediador, ambos se comprometieron a que ante cualquier noticia o hecho que pudiera poner en peligro el acuerdo se comunicarían vía telefónica o a través de un emisario para aclarar dudas.
Para Chávez, Uribe rompió ese compromiso porque quizás cedió a las presiones. "En la reunión que celebramos en Hato Grande le dije que habrían presiones, que publicarían noticias y quizás se simularían algunos hechos, pues hay gente que no está interesada en la paz", explicó.
Sin embargo, aseguró que ante los evidentes avances tal vez hubiesen inventado algo más grave, "como un atentado para de esa manera terminar con el proceso".
En la visión del venezolano, la extrema derecha colombiana no quiere paz, pues defienden la tesis de que van a acabar con la guerrilla. "El conflicto militar no tiene solución militar, hay que buscar una solución política, pues las presiones son terribles, infinitas", reflexionó Chávez.
Se refirió a un comunicado del Comisionado de Paz de Colombia, Carlos Restrepo, que se hizo público durante su reciente visita a Francia.
Aseguró que el comisionado mintió al asegurar que él (Chávez) hizo público algo que era secreto: la probable asistencia de Uribe a una eventual reunión de Chávez-Marulanda en el Caguán si las FARC aceptaban el compromiso de liberar a un grupo de sus secuestrados.
"Nunca se dijo que era secreto, no había acuerdo de confidencialidad. Yo decidí hacerlo público para dar una buena noticia", explicó Chávez.
Sin embargo, el Restrepo aseguró en el comunicado que Uribe asistiría sólo si se liberaban a la totalidad de los detenidos por las FARC. "¨Si liberaban a todos para qué voy a ir al Caguan?", se preguntó el presidente venezolano.
Subrayó que después, se pusieron las cosas en su lugar en otro comunicado emanado de Colombia.
Ante los acontecimientos, Chávez aseguró que perdió la confianza y eso va afectar las relaciones con Colombia, "me siento traicionado en mi buena fe", dijo.
Chávez finalizó comentando que espera una llamada de su homólogo colombiano o un emisario para aclarar lo sucedido porque, a pesar de lo sucedido, él está dispuesto a seguir ayudando en el proceso de canje humanitario y de paz. "Algún día habrá paz en Colombia y los secuestrados serán liberados", dijo.
Fuente: Télam