Mañana es la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Colombia y pareciera que el país está dividido en dos bandos. Pero en relación a las políticas de género, el panorama es más claro: hace un par de semanas se lanzó una campaña llamada “Coalición de género para apoyar a Petro y Angela María Robledo”. Se trata de un grupo de activistas y feministas que buscan comprometer a los candidatos –a través de redes sociales, videos en Youtube y campañas en Change.org– a llevar adelante una agenda de género que entienda la diversidad de las mujeres en Colombia. Hace un par de días, le entregaron una carta a Movimientos Progresistas, el partido de Gustavo Petro.
Una de las promotoras es Catalina Ruiz-Navarro, periodista colombiana y activista feminista que vive en la Ciudad de México, conocida en sus redes como @CatalinaPorDios. Ella misma cuenta en su charla TED “Hablemos de Feminismos” que se puso así porque “desde niña me han regañado y me decían ¡Catalina por Dios!, pero no adentro de mi casa, sino que el problema era afuera. Cuando corría, me subía a un árbol o hablaba fuerte y tardé años en darme cuenta de que esto no era un problema mío, sino de género y que nos afecta a todas”.
Para Catalina, mañana se elegirán más que dos presidentes: “se elegirá entre dos proyectos nacionales opuestos. El regreso de un movimiento conservador autoritario de la mano de Iván Duque o una agenda progresista de derechos económicos y humanos que tiene como eje la implementación del acuerdo de paz, liderada por Petro”.
“Cuando decimos Duque en realidad decimos Alvaro Uribe, presidente del Senado con mayoría de bancada, quien está detrás, junto con todo el sector más corrupto del país”, aclara CatalinaPorDios. Ella denuncia que algunos miembros de su gabinete se han mostrado en contra del matrimonio igualitario, la adopción y el aborto: “uno de los aliados de Duque es Alejandro Ordóñez, quien fue procurador por varios años y persiguió a las mujeres que abortaban, médicos que prestaban el servicio, jueces que los autorizaban y defensores de derechos humanos. También persiguió el matrimonio igualitario. Y muchos dicen que este hombre podría llegar a ser su ministro de Defensa o Salud”.
Aborto. Si bien en Colombia el aborto es legal desde 2006, gracias a “la tutela”, un mecanismo en el que los ciudadanos de a pie pueden reclamar sus derechos fundamentales, “hay un nivel de impunidad muy alto del 95% debido a la ignorancia porque no existen capacitaciones en género. Si bien el aborto es legal, la gente, los médicos ni las enfermeras lo saben. Hay mucha desinformación y eso hace que la implementación esté muy atrasada. Lo que pasa en Argentina es muy emocionante y ojalá se contagie”.
Voto de género. Más de 18 millones de mujeres están habilitadas para votar, es decir, más del 51% de la población. “Esto significa que nuestro voto es decisivo para elegir al próximo presidente de Colombia y quien sea elegido no puede dar la espalda a la garantía y el avance de nuestros derechos, y de los derechos de todas las personas que son discriminadas por su orientación sexual, expresión o identidad de género”, aclara la carta. n