Washington – Un ex técnico de la empresa Wal-Mart, despedido el mes pasado por el gigante de la distribución por haber grabado llamadas telefónicas sin autorización, afirmó que formaba parte de un sistema muy amplio de espionaje clandestino, informó hoy el Wall Street Journal.
El sistema estaba dirigido a vigilar no sólo a los empleados, sino también a los detractores de Wal-Mart, a ciertos accionistas y a empleados de la consultoría McKinsey and Co, según el técnico Bruce Gabbard.
Wal-Mart también habría encargado a uno de sus empleados -de cabellos largos para pasar más desapercibido- de infiltrarse en un grupo de activistas para saber si intentarían perturbar la reunión anual del grupo, según el artículo.
El número uno de la distribución habría utilizado asimismo un sistema de vigilancia muy sofisticado, que permitía seguir y grabar las búsquedas por Internet de todos los que se conectaban en la red informática de Wal-Mart.
El sistema es tan afinado que permite dar la alerta sobre la descarga de imágenes pornográficas, añade el WSJ.
Bruce Gabbard fue despedido a comienzos de marzo tras haber grabado sin autorización las llamadas entre el servicio de prensa de la empresa y un periodista del The New York Times.
El técnico explicó al diario que había actuado por su propia cuenta debido a que estaba sufriendo una fuerte presión para contener las filtraciones hacia la prensa.
Fuente: AFP
Como el Gran Hermano, pero en Wal-Mart
Un ex empleado del supermercado confesó que formó parte de un sistema de espionaje clandestino que estaba dirigido avigilar a trabajadores, detractores del comercio, algunos accionistas y empleados de una consultoría.
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