El gigante industrial alemán Siemens fue condenado ayer a pagar millonarias indemnizaciones en Alemania y Estados Unidos para archivar el escándalo global por las coimas que pagó en numerosos países para obtener contratos y negocios. Según se indicó, Siemens deberá pagar 528 millones de dólares en Alemania y otros 800 millones en los Estados Unidos. En ambos casos la empresa indicó que "aceptaba" las multas impuestas por la Fiscalía de Múnich y por las autoridades judiciales estadounidenses. En este último caso, una parte de la multa (350 millones de dólares) irá a manos de la Securities and Exchange Commission (SEC), organismo regulador del mercado bursátil. La factura total, entonces, se eleva a más de 1.300 millones de dólares.
Y tratándose de sobornos para obtener contratos, la Argentina no podía faltar en la lista de países involucrados. Y aunque el tema se sabía, ayer se confirmó oficialmente que la multinacional reconoció que pagó sobornos a los gobiernos de Carlos Menem y de Fernando De la Rúa. En ambos casos por el famoso contrato por la confección de los DNI.
En el ámbito del Gobierno argentino la noticia del final del proceso a Siemens era esperada con marcada expectativa, ya que la empresa alemana había ganado en el Ciadi una demanda por más de 200 millones de dólares (por ese contrato de los DNI incumplido). Atenta a la nueva realidad, admitiendo los sobornos globales, la Argentina tendría sobrados motivos para evitar ese pago de indemnización a la multinacional.
Pero la impaciencia iba más alla de ese punto económico: hay varios personajes de la polìtica local que podrían verse involucrados en las espinosas denuncias. Todos esperan que Siemens detalle a quienes les entregó esas montañas de dólares. El trabajo de investigación hecho por Deveboise & Plimpton, señala que Siemens admitió haber pagado coimas entre 2001 y 2007 por unos US$ 31 millones. Si el período se extiende hasta 1998, las coimas llegan a US$ 100 millones.
En nuestro país la causa de los DNI, como las de la mayoría que investigan corrupción, no ha registrado grandes avances. El juez federal Ariel Lijo espera que estas nuevas revelaciones terminen haciendo el trabajo que él no pudo llevar adelante.
Siemenes dice haber pagado las coimas a dos funcionarios argentinos, de los que todavía no se conocen los nombres, pero si algunos datos. Uno fue funcionario del gobierno de Menem y luego diputado nacional. El otro, indica el diario La Nación, "fue ministro de De la Rúa y cobró 660.000 dólares por asegurar la continuidad del contrato. De esa suma una parte iría, según había prometido ese funcionario de la Alianza, a la SIGEN".
El documento, agrega el matutino, destaca incluso que el funcionario menemista viajó a Berlín con un ministro argentino -no dice si en funciones o retirado-, entre diciembre de 1999 y marzo de 2000, "para reclamar pagos comprometidos por Siemens". Nada se dice, sin embargo, sobre los presuntos pagos a funcionarios del gobierno de Eduardo Duhalde, queriendo reflotar el tema de los DNI cancelado un tiempo antes. en un intento por reflotar el contrato cancelado por Ramón Mestre en la gestión De la Rúa, a cambio de 10 millones de dólares.
Las coimas, según el informe conocido ayer, fueron pagadas por Siemens, además de la Argentina, en Venezuela, Bangladesh, Vietnam, China y Rusia. La historia promete nuevos capítulos, porque los nombres y apellidos de los funcionarios argentinos que recibieron el dinero de la multinacional alemana ya están asentados en la investigación y, tarde o temprano, saldrán a la luz.