El presidente de China, Xi Jinping, se mostró este lunes por primera vez con un barbijo, tras la aparición del brote de coronavirus. El mandatario asiático buscó darle ánimo a su pueblo y declaró: "En la medida en que nuestros camaradas trabajen juntos, luchen valientemente y superen las dificultades, no hay duda de que podremos conseguir una victoria plena en la lucha contra la epidemia".
Además, destacó que Wuhan, el lugar donde aparecieron los primeros casos y que más afectado se vio por la epidemia, "es una ciudad heroica". "La gente de Hubei y de Wuhan es también heroica y nunca en su historia ha sido derrotada por ninguna dificultad ni ningún peligro", remarcó.
"Todo el partido, las fuerzas armadas y el pueblo de todos los grupos étnicos de China trabajan juntos con el pueblo de Hubei y de Wuhan", afirmó Xi en Beijing, mientras inspeccionaba las labores de prevención y control de la epidemia.
Xi Jinping estuvo visitando uno de los hospitales de la capital china y aprovechó su aparición ante los medios para asegurar que no se realizarán despidos a gran escala y que el país se esforzará por cumplir los objetivos económicos y sociales este año, para que así las consecuencias de esta enfermedad sean las menos posibles.
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Por otro lado, hoy millones de personas en China volvían a sus puestos de trabajo preocupadas por el contagio. Dadas estas circunstancias los negocios y servicios dirigidos al público han tomado medidas para frenar los contagios: tomar la temperatura al cliente y recurrir al lavado de manos con desinfectantes. Y el Gobierno ha propuesto que en las oficinas se mantenga una distancia mínima de un metro entre compañeros.
Ante tales circunstancias, el home office (trabajo desde el hogar) se ha convertido en una alternativa para evitar nuevos casos de infección. Por ejemplo, la semana pasada más de 200 millones de personas cubrieron su puesto desde casa y, además, el 60% de las empresas chinas está planteándose incorporar este nuevo sistema.
Cifras. El número de muertes por el coronavirus de Wuhan se elevó hoy a 910 en todo el mundo, la gran mayoría en China continental, mientras que ya son más de 40.000 las personas infectadas.
Además, el Ministerio de Salud de Japón reveló que se detectaron 60 nuevos casos en el crucero que permanece varado en el puerto japonés de Yokohama desde la semana pasada, por lo que son al menos 130 los contagiados hasta el momento en la embarcación, uno de ellos argentino.
JPA/MC
