El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, aseguró que el ataque militar colombiano que terminó con la vida del guerrillero Raúl Reyes frustró la liberación de 12 rehenes, entre los que estaba Ingrid Betancourt y los tres estadounidenses en poder de las FARC.
"Lamento comunicarles que las conversaciones estaban avanzadas. Hoy nos quieren vincular con las FARC. ¡Qué cinismo!", manifestó Correa.
El mandatario ecuatoriano hizo estas declaraciones luego de que las fuerzas de seguridad colombianas lo acusaran de querer “oficializar” las relaciones con la guerrilla y difundieran un documento hallado en la computadora de Reyes en el que el número dos de las FARC da cuenta de sus contactos con el ministro de Seguridad ecuatoriano, Gustavo Larrea.
Las declaraciones de Correa fueron rechazadas por Álvaro Uribe, quien sostuvo que no tenía conocimiento de los contactos entre Larrea y las FARC. Con respecto a la supuesta liberación de rehenes, el gobierno colombiano consideró que "lo que revelan los documentos (de la computadora de 'Raúl Reyes') tiene más bien las características de tráfico de secuestrados con fines políticos".
Pero las acusaciones de la administración de Uribe no se limitaron a Correa. Ayer, el jefe de la policía colombiana, Óscar Naranjo, reveló que otro de los documentos encontrados en la computadora de Raúl Reyes da cuenta de que el presidente venezolano Hugo Chávez aportó 300 millones de dólares a las FARC, a través de un muy rentable negocio petrolero.
Las acusaciones dieron lugar a un fuego cruzado entre las partes y motivaron al ministro del Interior venezolano, Ramón Rodríguez Chacín, a sostener que Naranjo mantenía un vínculo muy estrecho con el recientemente abatido narcotraficante Wilber Varela, alias “Jabón”.
Mostró una computadora que habría encontrado en el lugar donde ultimaron a Varela y aseguró que en el equipo halló información sobre "lazos de afinidad consanguíneos y de negocios entre el general Naranjo y Jabón"".
También dijo haber hallado en esa computadora detalles sobre el pago de un soborno al ministro Juan Manuel Santos para que "Naranjo ocupara un lugar en el alto mando". Rodríguez indicó que no había ofrecido esta información antes por "ética" , pero que ahora "las reglas del juego han cambiado".
El conflicto regional, que mantiene preocupado al resto del mundo (sobre todo, a los mandatarios del resto de Latinoamérica) llegará hoy a la tarde hasta la Organización de Estados Americanos (OEA), adonde Uribe pretende encontrar una salida diplomática a la crisis.
Dos resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU serán utilizadas por el gobierno colombiano para justificar la incursión militar en Ecuador ante el organismo multilateral. Las resoluciones, 1368 y 1373, de septiembre del 2001, dieron vía libre a la intervención militar de Estados Unidos en Afganistán para enfrentar la amenaza terrorista de Al Qaeda -que mantenía bases en este país bajo la complicidad del gobierno Talibán.
Aliado histórico de Colombia, Estados Unidos respalda al gobierno de Uribe y hasta habría sido clave en la operación que terminó con la vida de Reyes. El alto mando militar colombiano reconoció que los servicios de inteligencia estadounidenses proporcionaron información clave que permitió localizar al número dos de las FARC en Ecuador.
Mientras tanto, en Colombia, el nivel de popularidad de Uribe no para de subir. Una encuesta reveló que el 83 por ciento de la población colombiana respalda la decisión del mandatario de atacar el campamento de Reyes en Ecuador, reveló el diario El Tiempo .
Por el conflicto, tanto el gobierno de Chávez como el de Correa cerraron las embajadas colombianas en sus países y movilizaron tropas a la frontera con Colombia.