En el ALBA, la unión de países “boliviarianos” la música está cambiando o los músicos están actuando distinto. Y gran parte de ello es una avanzada fuerte desde Estados Unidos para generar puentes de diálogo, estrategia que al menos en Sudamérica comienza a mostrar resultados. Si bien pueden existir diferencias, la estrategia que han aplicado en Washington es solicitar dejar de lado el “tono” confrontativo y retórico, especialmente cuando hay intereses en común.
En el día de ayer, el mismísimo Rafael Correa del Ecuador recibió en Quito a la Secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton. Recordemos que durante los últimos años, y casi desde que Correa iniciara su mandato en el 2007 ha sido por siempre un aliado muy importante del venezolano Hugo Chávez y muchas veces ha tenido una retórica compleja para con los norteamericanos.
Con la visita al Ecuador, ambos países iniciaron una nueva etapa de diálogo directo al más alto nivel. El palacio de Carondelet fue el centro del encuentro central de la cumbre bilateral, aunque en las calles aledañas la policía tuvo que mantener a raya a furiosos ciudadanos ecuatorianos que se acercaron con toda las ganas de protestar contra la ilustre visitante.