Washington - La Cámara de Representantes ignoró hoy las amenazas de veto del presidente George W. Bush y aprobó un proyecto de ley que ordena la retirada de tropas de Irak a partir del próximo primero de octubre.
La medida fue aprobada por 218 contra 208 votos, luego de que un jefe militar dijera a los legisladores que la ola de violencia en ese país árabe estaba mostrando algunos signos de "mejorar".
"Nuestras tropas están en medio de una guerra civil con enemigos no claros y ninguna clara estrategia de éxito", dijo el líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, el demócrata Steny Hoyer. La mayoría de la oposición pretende aislar a Bush en su estrategia para la devastada Irak pero el jefe de la Casa Blanca afirmó hoy que lo único que puede apurar una retirada es un pedido del gobierno iraquí de Nuri Al Maliki.
La declaración de la Cámara baja -que ahora pasara al Senado- no es vinculante para el gobierno, por lo que Bush anticipó que vetará cualquier norma que pretenda imponer un calendario de repliegue a las fuerzas militares.
Antes del debate, declaró ante los diputados el jefe de las fuerzas de Estados Unidos en Irak, el general David Petraeus, quien dijo que el país árabe entrará en caos si los legisladores aprueban el proyecto. Petraeus se presentó en el Congreso a pedido de Bush, en un nuevo intento del presidente para convencer a los representantes de que eviten el pronunciamiento qaue rechaza el gobierno.
Bush reiteró ayer su oposición a fijar plazos "arbitrarios" para una retirada militar que según él podría tener efectos "desastrosos" para la seguridad de Irak, Medio Oriente y su país, y dijo que los legisladores pretenden saber más que los generales que están en Irak, y que también desaconsejan una retirada.
La promesa de veto de Bush prefigura un largo conflicto con los demócratas, que arrebataron a los republicanos de Bush el control del Congreso al ganar las elecciones legislativas de noviembre pasado gracias al voto de una enorme porción del electorado disconforme con la continuidad de la guerra en Irak.
" Por primera vez, el presidente tendrá que hacerse responsable de esta guerra en Irak. Y él no quiere enfrentar la realidad", dijo la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi.
La ley es en realidad una norma para financiar las guerras en Irak y Afganistán que autoriza fondos por 124.000 millones de dólares, pero también pide comenzar la retirada el 1 de octubre y completar la salida para el 1 de abril de 2008.
Más allá de ese plazo, un número indeterminado de soldados estadounidenses puede permanecer en el país pero sólo para misiones no combativas, como operaciones contraterroristas o entrenamiento de las fuerzas iraquíes.
La ley tiene previsto llegar al despacho de Bush la semana próxima, luego de que sea votada mañana en el Senado.
El debate sobre cómo poner en marcha una estrategia de salida enfrentó al Congreso, con atribuciones para el control de fondos, y la Casa Blanca, la autoridad para la conducción de la guerra.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, acusó a Bush de haber caído en un "estado de negación" y no quiere escuchar a quienes advierten sobre el fracaso del plan de Estados Unidos para Irak.
Fuente: Télam