El lujoso palacio que había remodelado el expresidente ucraniano Viktor Yanukovich, que fue derrocado en 2014, fue totalmente desmantelado en un increíble robo: sólo quedaron tres sillas, un sofá y cuatro mesas.
La víctima directa fue el fiscal general Viktor Pshonka, que ocupaba la mansión después de que Yanukovich se haya exiliado en Rusia tras ser acusado de "tirano" al momento de ser derrocado por una revuelta popular.
"La propiedad fue forzada en un sólo lugar, la puerta de cristal se rompió totalmente", contaron las autoridades a la televisión ucraniana. "Se llevaron todo de la casa, desde equipos electrónicos hasta los enchufes eléctricos", relataron.
Además de la casa principal, los ladrones saquearon las casas contiguas. Aún así, respetaron la religión: el único edificio que quedó sin tocar fue una pequeña iglesia.
El palacio remodelado por Yanukóvich está ubicado a 40 KM de la quinta presidencial y quedó desprotegida desde que Ucrania entró en tensión con Kiev y el batallón fue enviado a custodiar el este.
Se trata de una enorme propiedad rural que cuenta con una mansión recubierta de mármol, un campo de golf privado y un zoológico. La casa fue remodelada por el exmandatario, que había gastado 12 millones de dólares en la decoración de sus interiores.
Las autoridades están convencidas de que este robo "no fue efectuado en un solo día" y que contó con "importantes complicidades".
