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Brasilia
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, se recuperó ligeramente en un sondeo de intención de voto divulgado hoy, en el que supera en siete puntos a la opositora Marina Silva para las elecciones del próximo 5 de octubre y obtiene un empate en una posible segunda vuelta.
El sondeo de la reputada firma Datafolha muestra que Rousseff obtendría el 37% de los votos en la primera vuelta, frente al 30% de Silva y el 17% del dirigente socialdemócrata Aécio Neves.
Con respecto al último sondeo, realizado hace una semana, Rousseff ganó un punto porcentual, Neves subió dos y Marina Silva, candidata del Partido Socialista Brasileño (PSB) tras la muerte de su líder, Eduardo Costa, en un accidente aéreo, perdió tres.
En este escenario se celebraría una segunda vuelta de las elecciones presidenciales el 26 de octubre. Ante esa hipotética segunda vuelta, Datafolha mantuvo la igualdad que muestran los sondeos de las últimas semanas, con 46% a favor de Silva y 44% de votos a la actual jefa de Estado.
El margen de error es de dos puntos porcentuales, por lo que las dos candidatas están virtualmente empatadas.
La candidata por el Partido de los Trabajadores (PT) subió un punto con respecto a la última encuesta de Datafolha y la candidata del PSB bajó uno.
El sondeo fue realizado con encuestas a 5.340 electores en todo el país entre el miércoles y el jueves, y fue divulgada por el diario Folha de São Paulo y la cadena Globo TV. Los resultados de Datafolha son similares al sondeo más reciente realizado por Ibope, que otorga a Rousseff el 36%, mientras que la ecologista Marina Silva se situó en el 30% y Neves subió al 19% en la intención de votos.
Por su parte, la consultora Ibope también coincide en señalar un empate entre Rousseff y Silva dentro del mismo margen de error, con 43% favorable a Silva y 40% a la actual mandataria.
Esta semana, la ya caliente carrera por la presidencia en Brasil tomó aún más temperatura. El coordinador general de la campaña de Marina Silva, Walter Feldman, se indignaba ante la prensa local: “Cuando se desespera, el PT se vuelve terrorista. Es de lo más sucio. Eso es política de extrema derecha”, se quejó el estratega opositor.
Pero la presidenta en ejercicio se mantiene confiada ante lo que considera reglas del juego limpias en la política: “Todo lo que discutimos acerca de Aécio y Marina es sobre lo que ellos hicieron o hablaron. Es muy peligrosa la victimización. No estamos atacando personalmente, hasta porque Marina está bien intencionada”, dijo Dilma, en un encuentro, al diario O Globo, uno de los más importantes de ese país.
