INTERNACIONAL
joaquim levy

Dilma y un ministro de Economía que le gusta a los mercados

La prensa brasileña da por hecho el nombramiento, que se anunciaría en los próximos días.

Fuera. Guido Mantega, el actual responsable de Economía, criticado por “intervencionista”.
| AFP

Agencias
Brasilia
Dilma Rousseff parece haber encontrado la cuadratura del círculo a la hora de elegir a su ministro de Economía: todo indica que ya se decidió por un economista ortodoxo, que agrada a los mercados, pero que al mismo tiempo ya fue funcionario de un gobierno del PT, el primero de Lula da Silva, entre 2003 y 2010.

Según fuentes del Planalto, la presidencia brasileña, citadas por la prensa local, el sucesor del actual ministro de Hacienda, Guido Mantega, será Joaquim Levy. El anuncio, que iba a hacerse formalmente ayer, fue postergado.

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Doctor en economía de la Universidad de Chicago, de 53 años, Levy fue secretario del Tesoro en el primer gobierno de Lula da Silva, cuando el entonces presidente formó un equipo económico ortodoxo que tranquilizó a los mercados, temerosos por la llegada al poder de un sindicalista de izquierda, temor que en aquel momento había llevado el dólar hasta los cuatro reales.

Después de su paso por el gobierno, Levy ocupó cargos en el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y el Banco Interamericano de Desarrollo. Actualmente era director de la gestión de fondos de inversión del banco Bradesco, el segundo banco privado del país.

“Parece un candidato muy fuerte. Ya se mostró como un hombre austero y con ideas interesantes. El mercado está aprobando su nombre”, dijo el analista Marcelo Pereira, de la consultora Tag Investimentos. “En principio convence al mercado. Aunque tiene ideas distintas al PT, hay que ver cómo se desarrolla eso”, añadió.

Levy sucederá a Guido Mantega, un economista del riñón del PT, a quien los operadores del mercado atribuyen una política “intervencionista”, con varios paquetes de estímulo que generaron inflación. 

Al trascender el nombre de Levy, la Bolsa de San Pablo se disparó ayer un 5,02%, en una señal de optimismo ante la perspectiva de que el gobierno aplique una política ortodoxa para reactivar el crecimiento.

Según la prensa brasileña, otro de los funcionarios de la etapa “ortodoxa” de Lula volverá al gobierno. Se trata de Nelson Barbosa, ex secretario ejecutivo del Ministerio de Hacienda cuando Levy estaba en el Tesoro y hoy es profesor en la prestigiosa Fundación Getulio Vargas.
De ser confirmado, Levy tendrá la difícil tarea de reactivar la estancada economía brasileña, que prácticamente no crecerá este año, su cuarto consecutivo de magro crecimiento, mientras la inflación superó el techo de 6,5%.

El banquero que dijo que no
Según la prensa brasileña, antes de decidirse por Joaquim Levy, Dilma Roussef sondeó al banquero Luiz Carlos Trabuco, presidente de Bradesco, uno de los tres bancos más grandes del Brasil. El ejecutivo rechazó la oferta porque ya había asumido el compromiso de suceder al frente del banco al actual titular del Consejo de Administración.  Furiosa por los trascendidos, Dilma negó el jueves haberle ofrecido el cargo. “Yo no divulgué nada, ustedes no aciertan una”, dijo a los periodistas, después de participar en Brasilia de la Conferencia Nacional de Educación. Durante la campaña  electoral, el PT había acusado a Marina Silva de que, en caso de ganar, aplicaría una política económica “neoliberal” porque su principal asesora era Neca Setúbal, de la familia propietaria del banco Itaú.