El presidente de Colombia, Iván Duque, llamó ayer a la comunidad internacional a actuar contra Nicolás Maduro por crímenes de “lesa humanidad”, en una conferencia de prensa conjunta con el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo.
Duque habló al término de una gira de tres días de Pompeo en países vecinos de Venezuela con el objetivo de incrementar la presión para que el líder chavista abandone el poder.
El mandatario colombiano, aliado clave de Estados Unidos en la región, afirmó que un informe publicado esta semana por la ONU confirma que “hay un régimen de violaciones a los derechos humanos de manera sistemática” en Venezuela, y que “la cabeza de la dictadura es en sí mismo un criminal de lesa humanidad y la comunidad internacional tiene que actuar para que esta situación termine”.
Maduro “es un criminal de lesa humanidad y su círculo cercano también está rodeado de criminales de lesa humanidad”, dijo.
El informe de 411 páginas de la ONU denunció “motivos razonables” para creer que autoridades y fuerzas de seguridad de la otrora potencia petrolera planificaron y ejecutaron graves violaciones a los derechos humanos, algunas de las cuales “constituyen crímenes de lesa humanidad”.
Caracas rechazó el documento al que considera “plagado de falsedades”.
Por su parte, Pompeo describió a Duque como “un verdadero líder para la región” que “representa la dignidad” de su pueblo y consideró que su apoyo “al presidente interino Juan Guaidó” y a la “transición democrática de una Venezuela sin la influencia maligna de Cuba, Rusia e Irán” es “increíblemente valiosa”.
Pompeo llegó a Bogotá el viernes tras visitar un centro para refugiados venezolanos en la ciudad brasileña fronteriza de Boa Vista, donde enfatizó la situación de casi cinco millones de venezolanos que huyeron de la crisis económica en su país. Dijo entonces que Maduro “tiene que irse”, desatando una furiosa reacción del líder venezolano que lo acusó a su vez de emprender una “gira guerrerista”.