QUITO.- Ecuador culpó el jueves al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, de la ruptura de relaciones diplomáticas entre Venezuela y Colombia, y analiza un pedido de Caracas de convocar una reunión de emergencia de la UNASUR para tratar la crisis.
"Se lo advertimos al señor Insulza, por lo menos tres o cuatro veces entre lunes y martes. Hablé telefónicamente con él para decirle que se actúe con responsabilidad, pero no entendió", dijo airado el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, cuyo país ejerce la presidencia pro témpore de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).
El ministro rechazó que el secretario no hubiera acogido la solicitud de Quito de posponer la sesión de este jueves de la Organización de Estados Americanos (OEA), en la que el gobierno colombiano presentó pruebas sobre la supuesta presencia de guerrilleros en Venezuela.
Tras ese debate, Chávez anunció la ruptura de relaciones y ordenó al Ejército estar en alerta. "Quien estaba llamado, estuvo advertido y no cumplió con su deber, es el señor secretario de la OEA, lamentablemente", agregó Patiño en rueda de prensa, apuntando que había fuertes sospechas sobre el riesgo de una ruptura.
El canciller aseguró que Quito nunca pidió cancelar la sesión sino "realizar consultas con los demás miembros (del Consejo Permanente) para analizar el actual momento político que pudiera afectar la paz de la región". Pero Insulza dijo que "esta reunión no se podía hacer a menos que se incinerara el estatuto. ¡Lo felicito, no incineró el estatuto, pero incineró la región!", afirmó el diplomático, quien puso en duda la denuncia colombiana.
"Ahora dice que esta crisis no nació ayer y, tan falto de huesos, llama al diálogo para curarse en salud" alegando que "no puede hacer más", reprochó. El ministro aseguró tener "muchas dudas" de que Insulza "pudiera retomar" la cuestión colombo-venezolana "con un mínimo de capacidad" porque "no le dio la talla".
"No tenemos confianza en que el señor Insulza pudiera reconducir esto", añadió, subrayando que "es un día aciago para las relaciones de América Latina".
Patiño también vetó al secretario como mediador en el proceso para restablecer las relaciones con Colombia, reactivadas parcialmente en noviembre pasado tras 21 meses de ruptura por un bombardeo contra una base de la guerrilla de las FARC en Ecuador, que dejó 25 muertos el 1 de marzo de 2008.
"Ya no vamos a considerar a la OEA evidentemente", dijo, y anunció que consultará con el presidente ecuatoriano y pro témpore de la Unasur, Rafael Correa, sobre el pedido de Venezuela para realizar una reunión de emergencia de ese organismo por la crisis entre Bogotá y Caracas. "Consultaré al presidente (Correa) para que me dé disposiciones respecto a esto", señaló. Venezuela pidió la cita a Ecuador para "denunciar las graves agresiones" de Colombia.
Patiño estimó que la Unasur tiene "más capacidad de diálogo entre nosotros y será un instrumento para avanzar en el diálogo". En cuanto a una posible fecha para la reunión, el ministro anotó: "yo no quiero cometer el mismo error de precipitar" una decisión como lo hizo Insulza. "Voy a consultar al presidente de la República. Creo que deberíamos consultar con los distintos gobiernos de América del Sur", incluidos el saliente y entrante de Colombia, añadió.
El nuevo mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, tomará posesión el 7 de agosto próximo. "Lo que pase ahora el otro gobierno (de Colombia) lo va a heredar", señaló Patiño y enfatizó que "apenas en dos semanas hay un nuevo gobierno y no sería de descartar que también pudiéramos conversar" con la administración de Santos "sobre el conflicto".
Fuente: AFP