El candidato a ocupar la Secretaría de Defensa de los Estados Unidos, Robert Gates, admitió este martes que su país no está ganando la guerra en Irak, durante una audiencia que se realizó en el Senado con quienes deben confirmar la designación propuesta por el presidente Bush.
Al ser interrogado por el senador demócrata Carl Levin sobre si creía que los Estados Unidos estaban ganando, respondió: "No, señor". Gates admitió, además, que el fracaso americano en el país árabe podría contribuir a conformar un frente de “hostilidad regional”.
El futuro secretario de Defensa de los Estados Unidos sostuvo también que el Ejército norteamericano, que invadió Iraq en el 2003, realizó el ataque sin las tropas suficientes, confirmando así lo que mantienen algunos generales de la fuerza.
Gates, ex director del Servicio Secreto durante el gobierno de Bush padre, fue propuesto por el presidente George W. Bush para reemplazar al saliente Donald Rumsfeld.
Durante la audiencia en el Senado, Gates dijo también que estaba en contra de un ataque contra Irán, excepto como "último recurso absoluto", y dijo que no apoyaría ninguna acción estadounidense contra Siria.
Con respecto al futuro de la guerra, Gates dijo estar “ abierto a nuevas ideas y propuestas” y sostuvo que el objetivo del gobierno norteamericano en el país árabe debería ser que “Iraq pueda sostenerse, defenderse y gobernarse”.