El flamante embajador argentino ante Estados Unidos, Fernando Oris de Roa, le entregó hoy en Washington sus credenciales al presidente norteamericano, Donald Trump, que le dijo "vas a hacer un gran trabajo". El nuevo diplomático renovó el compromiso de trabajar para fortalecer las relaciones bilaterales.
La embajada argentina en Estados Unidos comunicó por medio de su cuenta en Twitter la asunción formal de Oris de Roa: "Ya es Jefe de Misión y "Embajador Nombrado".
"Al presentar sus Cartas Credenciales al presidente Trump, el Embajador Oris de Roa transmitió los saludos del presidente Macri y renovó el compromiso de trabajar para fortalecer las relaciones bilaterales", se informó en la cuenta oficial.
En diálogo con Infobae, el nuevo embajador se mostró satisfecho con el paso dado este miércoles y mencionó la reacción que tuvo el mandatario estadounidense hacia él cuando le presentó en mano las credenciales en la Casa Blanca: "Trump me palmeó el hombro y me dijo: ´Vas a hacer un gran trabajo´".
"Apenas entré al Salón Oval dijo varias veces !Mauricio, Mauricio!", relató el diplomático, que ingresó a la residencia presidencial poco antes de las 10.00 (12.00 de Argentina) junto a seis nuevos embajadores de otros países.
Oris de Roa había sido designado en dicha función a comienzos de noviembre pasado por el presidente Mauricio Macri, luego de que el cargo quedara vacante tras la renuncia del ex ministro de Economía Martín Lousteau.
El flamante embajador no es un diplomático de carrera sino que su perfil está asociado al mundo privado, en particular al negocio agropecuario. Ejerció como presidente de la Compañía Continental de Cereales entre 1970 y 1993, y luego compró y se hizo cargo de la empresa cítrica tucumana San Miguel.
El jueves pasado ya había arribado a Washington, donde fue recibido por sus nuevos colaboradores, y el lunes entregó copia de sus credenciales al Departamento de Estado.
La formalización del nuevo representante nacional en Estados Unidos coincide con el nombramiento de quien será el embajador norteamericano en el país, el juez texano Edward Prado, de estrecha cercanía al Partido Republicano.
El pliego de Prado ingresará ahora al Senado de Estados Unidos, donde Trump cuenta con los votos necesarios para aprobarlo sin obstáculos.
Prado ocupará entonces el cargo que dejó vacante en enero de 2017 Noah Mamet, quien se despidió en el Palacio Bosch con motivo de la asunción del presidente Trump, dado que el protocolo de ese país establece que los embajadores políticos deben presentar su dimisión frente a un cambio de Gobierno.
