El papa Benedicto XVI reafirmó que el matrimonio es un don de Dios y que es para siempre.
El pontífice le dedicó ayer el Angelus dominical al matrimonio cristiano al pedir, a los esposos no dejarse "arrastrar" por el "hedonismo y el relativismo" y respetar los "compromisos asumidos el día del matrimonio", de ser fieles "en la alegría y en el dolor, en la salud y en la enfermedad".
Frente a la plaza San Pedro, Joseph Ratzinger llamó a sostener "la institución conyugal y familiar, fundamental para la sociedad", según consignó la agencia internacional Ansa.
Benedicto XVI explicó que en el Evangelio se revela la "verdad" del matrimonio" como proyecto original de Dios, íntima comunión de vida y de amor conyugal, fundada por el Creador y estructurada con leyes propias".
En tiempos en que el matrimonio atraviesa instancias que la misma dinámica social y cultural lo colocó en una situación de cambio, el papa pidió a los esposos " rezar sin cansarse nunca y perseverar en el cotidiano esfuerzo de mantener los compromisos asumidos el día del matrimonio".
" Se necesitan familias que no se dejen arrastrar por modernas corrientes culturales inspiradas en el hedonismo y el relativismo, y estén prontas más a cumplir con generosa dedicación su misión en la Iglesia y en la sociedad", enfatizó el Papa.
Fuente: Télam