El caso de Alexander Litvinenko, el espía ruso envenenado con polonio 210, ha tenido incluso derivaciones futbolísticas. Luego que dos compatriotas que se habían entrevistado con el ex agente secreto asistieran al partido que el Arsenal inglés y el CSKA de Moscú disputaron en Londres el 1 de octubre por la Liga de Campeones de Europa, investigadores británicos dispusieron la inspección del estadio.
Cuando se hablaba de una posible clausura a la cancha de uno de los grandes del fútbol inglés, finalmente se comprobó que los rastros de la sustancia radioactiva hallados en el estadio fueron mínimos, "casi imposibles de detectar" y que no suponen un "riesgo para la salud pública", según informó hoy el sitio del diario deportivo español Marca.
La inspección del estadio del Arsenal inglés se realizó en el marco de la investigación por el caso de Litvinenko, un ex espía ruso que falleció el pasado 23 de noviembre a causa de un envenenamiento con una alta dosis de polonio 210.
El ex agente secreto se había reunido el 1 de noviembre en un hotel londinense con dos rusos que asistieron al partido Arsenal-CSKA Moscú de la Liga de Campeones, por lo que se dispuso la inspección del estadio y hasta se había llegado a hablar de la clausura del lugar si se hallaban cantidades riesgosas.