Sully, el perro acompañante de George H.W. Bush se robó las miradas y los corazones de todos esta semana al participar de las ceremonias fúnebres del expresidente estadounidense. El animal alcanzó la fama internacional cuando el vocero de la familia Bush tuiteó una foto de Sully acostado a un lado del ataúd cubierto con una bandera con el texto: “Misión cumplida”.
Este martes, visitó la Rotonda del Capitolio en la capital de la nación junto a varias personas en sillas de rueda que se vieron beneficiadas de la Ley para Estadounidenses con Discapacidades, que Bush firmó en 1990, y su misión continuará este miércoles, cuando camine detrás del féretro del expresidente en la procesión militar por las calles de Washington, desde el Capitolio hasta la Catedral Nacional.
Después de un funeral de Estado en la Catedral, al que asistirán Donald Trump, Angela Merkel, el Emir de Kuwait y el príncipe Carlos de Inglaterra, el cuerpo de Bush será llevado de regreso a Houston para que descanse en la Iglesia Episcopal de San Martín. Finalmente, lo llevarán en tren a su lugar de descanso final en la Biblioteca y Museo Presidencial de George Bush en College Station y se espera que Sully participe de estas ceremonias, según el Houtson Chronicle.
John Miller, presidente y director general de la organización America’s VetDogs, dijo que la familia Bush contactó al centro médico militar nacional Walter Reed después de que la esposa del presidente de 73 años, Barbara, muriera en abril. Los perros proporcionados por America’s VetDogs son entregados sin costo para ofrecer un servicio que puede costar hasta 50.000 dólares entre la crianza, entrenamiento y colocación, dijo Miller.
America’s VetDogs escogió a Sully, en parte por su carácter tranquilo. "Tras la muerte de la señora Bush, el acompañamiento era gran parte del trabajo de Sully”, dijo Miller. “Una de las cosas que creo que fue importante para el presidente era la orden de ‘descanso’, cuando Sully recargaba su cabeza sobre el regazo del presidente". El perro puede realizar una lista de dos páginas de actividades, entre las que se incluyen contestar el teléfono y buscar elementos, según CNN.
Sully tiene 2 años. Fue nombrado así por el piloto retirado Chelsy "Sully" Sullenberger III, quien se volvió famoso por acuatizar de emergencia un avión de pasajeros averiado en el río Hudson en 2009 y salvar a todos a bordo. El perro viajó a Washington con el cortejo fúnebre a bordo del "Air Force One" y, la mañana del martes, las autoridades emitieron una advertencia de dos minutos por la llegada de Sully al Capitolio.
Sully caminó tranquilamente, llevado por la correa por Valerie Cramer, la gerente del programa de perros de servicio de America’s VetDogs. A su orden, se acostó y echó un vistazo sobre su hombro a los fotógrafos luchando por sacar su foto. No parecía desconcertado. Cramer lo llevó alrededor del féretro para que se sentara entre los demás. Después de unos minutos, el cortejo salió.
Sully regresará a America’s VetDogs en Smithtown, Nueva York, donde nació y fue entrenado, dijo Miller. Después se entrenará en Walter Reed para ayudar a los veteranos de guerra que reciben atención ahí. Sully, trabajará con dos perros que ya prestan sus servicios en el hospital de veteranos, sargento Dillon y sargento Truman, ayudará con terapia física y ocupacional a soldados heridos y personal en servicio activo.
D.S.