El festejo por la victoria de Barack Obama en las elecciones de Estados Unidos llegó hoy a todos los rincones del planeta, adonde personas de todas las nacionalidades celebraron el final de la era Bush y el advenimiento del “cambio” en la primera potencia mundial.
En Kenya, adonde vive una parte de la familia de Obama, los festejos tomaron la ciudad de Kisumu. Miles de personas que llevaban carteles con la foto del futuro mandatario se reunieron en el centro de la ciudad para expresar su alegría.
Manifestaciones similares tuvieron lugar en otros países como Francia y Alemania, mientras que la noticia llegó a la primera plana de los diarios de países como Irán y Rusia, hoy enemistados con Estados Unidos.
Las promesas de Obama de terminar con las guerras de Irak y Afganistán y de hacer lo posible para que Estados Unidos se “amigue” con el resto del mundo llevaron esperanza a todos los continentes.