Demócratas y republicanos buscan el respaldo de las estrellas tanto como su
dinero. Cualquier momento sirve para que las figuras de la televisiòn y el cine hagan
campaña por su candidato.
No es un secreto el nombre que marcarán George Clooney, Will Smith, Scarlett Johansson, Halle Berry y Oprah Winfrey este "supermartes" en la papeleta de votación. El candidato a la presidencia Barack Obama cuenta desde hace tiempo con el apoyo de todos ellos .
Su rival demócrata en la carrera presidencial, Hillary Clinton, cuenta, por su parte, con el respaldo de la cantante Barbra Streisand, el diseñador de moda Calvin Klein y el actor Tom Hanks. El director Steven Spielberg, que hace un año aún organizaba fiestas para recaudar fondos para ambos, también parece haberse decantado ahora por la ex primera dama.
Los candidatos republicanos también tienen apoyo en Hollywood, considerado habitualmente un bastión liberal. El religioso y conservador Mike Huckabee tiene de su lado al astro de películas de acción Chuck Norris. Los dos se presentan juntos tantas veces en la campaña electoral, que los medios ya bromean sobre "el show de Huck y Chuck".
De parte de Mitt Romney están los dos miembros del clan Osmond, Marie y Donny. Y el candidato con más posibilidades de los republicanos, John McCain, tiene entre sus seguidores aTom Selleck, Sylvester Stallone y el gobernador de California y ex "Terminator", Arnold Schwarzenegger.
Schwarzenegger se decidió por McCain hace pocos días. Poco después, el domingo, la esposa de Schwarzenneger, Maria Shriver, sobrina de John F. Kennedy y demócrata, reveló por su parte a quién apoya ella. En un evento de la campaña electoral para Obama con 6.000 personas en el campus de la Universidad de Los Ángeles se pronunció a favor del senador negro. Shriver comparó a Obama con el estado de California. "Diverso, abierto, inteligente, poco convencional, inspirador, soñador, líder".
Pero las estrellas no se quedan sólo en palabras bonitas. También sacan la chequera. "Tiene una opinión propia muy fuerte", comentaba la diva de Hollywood Liz Taylor hace un año sobre Hillary y le dio un cheque de 2.300 dólares, la cifra más alta que puede donar un particular en precampaña.
A Obama le donó dinero Ben Affleck. Michael Douglas apoyó a los dos. Su esposa Catherine Zeta-Jones apoyó con dinero a cinco postulantes demócratas. La actriz Rita Wilson, esposa de Tom Hanks, dio 2.300 dólares a Obama. Pero también a Clinton le dio dinero. Hace tiempo que Hollywood abre la alfombra roja en recepciones y fiestas para sus candidatos favoritos. Las estrellas, aspirantes a estrellas y donantes del negocio del cine y la música llenaron así con millones las arcas de la campaña electoral.
Según el Los Angeles Times, Obama había logrado en otoño (boreal) ya 2,2 millones de dólares en donaciones provenientes del negocio del espectáculo. Clinton, al parecer, había sumado en septiembre pasado 2,1 millones de dólares de Hollywood.
La donación de 2.300 dólares de la multimillonaria reina de los talkshows Oprah Winfrey para Obama supone poca cosa al lado del compromiso que la popular presentadora mostró con el candidato demócrata, al que acompañó durante días en su gira por Carolina del Sur. "Mi apoyo vale más que cualquier otro cheque que le pudiera dar", dijo Winfrey al presentador de la CNN Larry King.
El astro de Hollywood Will Smith, en tanto, aprovechó la promoción de su última película Soy leyenda para hablar bien de Obama. Es "la elección perfecta para el futuro de América", dijo. Y la guapa Halle Berry se ofreció a "levantar todos los vasos de cartón del suelo para allanarle el camino" al candidato negro.
