Cuando Isabel II no acudió a la inauguración del nuevo estadio del Arsenal en Londres, los británicos comentaron que sólo se trataba de una distensión muscular. Después de todo, la reina nunca había sido una gran aficionada al fútbol.
Pero hoy, la ausencia de la Reina de una importante carrera de pura sangre ingleses desató serias preocupaciones.
"Nunca en la vida nuestra reina renunciaría a una carrera sin necesidad ", dijo una espectadora a periodistas en la ciudad de la carrera, Newmarket, en el sudeste de Inglaterra.
"Y todos los niños que ahora no la podrán saludar. Su Majestad jamás los habría decepcionado si no es que realmente está sintiendo dolores".
Además, la carrera de caballos estaba dedicada al cumpleaños número 80 de la Reina.
Cada competencia llevaba el nombre de exitosos caballos de carrera que alguna vez tuvo la Reina: Pall Mall, Highclerce, Monaveen, Aureole y Canisbay.
"Nuestros meses de preparativos no fueron totalmente en vano", dijo, sin embargo, Lisa Hancok, directora del hipódromo de Newmarket ya que la Reina decidió que, a pesar de los dolores de espalda, al menos asistiría a la comida que se celebrará en el famoso Jockey Club.
Desde el Palacio de Buckingham se repite una y otra vez que realmente no se trata de otra cosa que de una distensión muscular.
Y ese no sólo es el mensaje para la prensa sino también para las embajadas extranjeras que preguntan por la salud de Su Majestad para transmitir la respuesta a sus gobiernos en todo el mundo.
Isabel II se desgarró un músculo de la espalda, según la información oficial, durante el verano en el marco de una actividad no especificada en detalle, que probablemente fue un paseo a caballo en los alrededores de su castillo de Balmoral en Escocia.
Pero hasta hace poco no se hablaba de problemas en la espalda. En los últimos días, empezó a circular el rumor de que los médicos recomendaron a la reina de 80 años que redujera sus actividades.