Se enamoró de Chávez cuando aún no era Chávez. Fue la cara bonita de la campaña de 1998 y más tarde primera dama del gobierno bolivariano. Se divorció en 2004, luego de dos años de turbulencias en la pareja y rumores de infidelidad. Pasó a las filas de la oposición y se convirtió en ferviente militante contra el “autoritarismo” del presidente venezolano. Pero Marisabel se arrepintió y hoy, en el peor momento de Chávez, la vida vuelve a encontrarla del lado de su ex.
Marisabel Rodríguez –49 años, periodista y segunda esposa de Hugo Chávez– sobrevivió al cáncer. Tal vez por eso la enfermedad del mandatario la sensibiliza especialmente. Ella dejó atrás los rencores personales y las diferencias políticas con Chávez y, desde que el mandatario se internó por cuarta vez en Cuba, se transformó en “guardiana” de su privacidad y firme defensora de la continuidad del chavismo en el poder.
Fuentes cercanas a Marisabel incluso dijeron a PERFIL que en este momento se encuentra en La Habana acompañando a su hija Rosinés, quien viajó a la capital cubana para ver a su padre.
Hace años que la ex esposa de Chávez se llamó a silencio. Por eso sorprendió que en las últimas semanas reapareciera una y otra vez en Twitter con comentarios como: “Chávez convalece así que nuestra misión es: cada cual desde su trinchera consolide la Revolución con eficiencia, capacidad y patriotismo”; o “Quizás como esposa quería más atención y fui débil, pero todo su sacrificio y sus renuncias tenían como fin profundizar la Revolución”.
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