La guerra en Medio Oriente podría convertirse en un "conflicto regional", dijo el jefe de Hezbollah
Hassan Nasrallah alertó por una "guerra regional" y responsabilizó a Estados Unidos por la escalada del conflicto: "Debe detener rápidamente la agresión a Gaza", dijo.
Guerra entre Israel y Hamas: se multiplican los ataques. |
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El jefe de Hezbollah, Hassan Nasrallah, advirtió por el nivel de conflictividad de la guerra entre Israel y Hamás, y dijo que podría convertirse en un conflicto regional si continúan los ataques a Gaza, al tiempo que responsabilizó a los Estados Unidos.
En su primer discurso desde que se desató la guerra hace casi cuatro semanas entre Hamás e Israel, el jefe del movimiento respaldado por Irán advirtió que "todas las opciones" estaban abiertas para una expansión del conflicto al Líbano.
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"Estados Unidos es totalmente responsable de la guerra en curso contra Gaza y su pueblo, e Israel es simplemente una herramienta de ejecución", dijo Nasrallah en una transmisión televisada, y calificó al conflicto de "decisivo".
"Quien quiera impedir una guerra regional, y esto está dirigido a los estadounidenses, debe detener rápidamente la agresión a Gaza", dijo.
Miles de seguidores se reunieron para escuchar el encendido discurso en un evento en los suburbios del sur de Beirut, un bastión de Hezbolá, celebrado en memoria de los combatientes del grupo muertos en los bombardeos israelíes. Otros se reunieron en otras partes del Líbano y de la región, incluidos Teherán y Bagdad.
El presidente estadounidense, Joe Biden, envió dos grupos de portaaviones al Mediterráneo oriental. En tono desafiante, Nasrallah dijo a Estados Unidos que "su flota en el Mediterráneo no nos asusta... estamos listos para enfrentar la flota con la que nos amenazan".
"Ustedes, los estadounidenses, saben bien que si hay guerra en la región, su flota no será de utilidad, ni el combate aéreo ayudará. Sus intereses, sus soldados y su flota serán los primeros en pagar el precio", amenazó.
Estados Unidos aseguró que “no quiere” que el conflicto armado se extienda al Líbano
En Washington, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que Hezbolá "no debería intentar aprovecharse del conflicto en curso".
"Esto tiene el potencial de convertirse en una guerra más sangrienta entre Israel y el Líbano que la de 2006", afirmó. "Estados Unidos no quiere que este conflicto se expanda al Líbano", dijo.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió a Hezbollah que "pagaría un precio inimaginable" por cualquier paso en falso.
El conflicto de 2006 entre Israel y Hezbollah mató a más de 1.200 personas en el Líbano, en su mayoría civiles, y a 160 en Israel, en su mayoría soldados.
Los funcionarios israelíes dicen que los sangrientos ataques de Hamas el 7 de octubre mataron a más de 1.400 personas, la mayoría de ellas civiles.
El Ministerio de Salud en la Gaza gobernada por Hamás dice que más de 9.200 personas han muerto en los bombardeos israelíes, en su mayoría mujeres y niños.
Nasrallah saludó al "heroico" Hamás, calificando los ataques del 7 de octubre como "100 por ciento palestinos" y diciendo que el plan no fue revelado a los aliados con antelación.
Además, elogió los ataques contra bases estadounidenses en Medio Oriente, después de una serie de ataques a instalaciones que albergan tropas estadounidenses en Irak y Siria.
