Decenas de miles de manifestantes, entre los que destacaban militares, pacifistas, parlamentarios y actores como Jane Fonda o Sean Penn, se movilizaron este sábado en Washington, bajo el lema “ Unidos por la paz y la justicia”, para exigir el fin de la guerra en Irak.
Fonda, conocida por su oposición a la guerra de Vietnam, tomó la palabra en su primera manifestación de este tipo en 34 años para explicar que ha decidido adherirse a las protestas contra el conflicto bélico en Irak porque " el silencio ya no es más una opción".
"Hace 34 años que no me expreso en una congregación contra la guerra porque tenía miedo de que, a causa de las mentiras propagadas sobre mí, se me utilizara para perjudicar a este nuevo movimiento antiguerra, pero el silencio no es más una opción", explicó la actriz, apodada "Hanoi Jane" hace treinta años por haber posado para las cámaras sobre una batería antiaérea vietnamita en julio de 1972.
Jane Fonda, de 69 años, rodeada de los actores y realizadores Sean Penn, Tim Robbins y Susan Sarandon, declaró que mucha gente le pregunta cuál es la diferencia entre ahora y la guerra de Vietnam. "Voy a contarles una diferencia enorme, fundamental: hicieron falta seis años para que los ex combatientes de Vietnam, los militares y sus familias se expresaran contra la guerra, ahora bastaron tres", subrayó la actriz.
La multitudinaria manifestación en Washington tiene como objetivo pedir al Congreso de mayoría demócrata, que ponga fin a la guerra en Irak.
"Vinimos para decirles a los responsables políticos que si no entran en razón y no votan una resolución tan vinculante como el balance humano de la guerra, ¡no vamos a apoyarlos!", advirtió el actor y director Sean Penn.
Esta manifestación pacifista, muestra de la presión ejercida sobre los legisladores demócratas, transcurre en la fase previa a la campaña por la elección presidencial de 2008, durante la cual los candidatos van a Hollywood a buscar apoyo y financiamiento.
"¡Traigan a los soldados de vuelta a casa inmediatamente!", se leía en varias pancartas que llevaban los manifestantes.
Esta movilización, la más ambiciosa después de la que reunió a entre 100.000 y 300.000 personas en septiembre de 2005 en Washington, fue organizada cerca del Capitolio, sede del Congreso.
" La voluntad de los electores debe ser respetada, escuchada y aplicada", expresó Hany khalil, una portavoz de la asociación organizadora, refiriéndose a la derrota de los republicanos en las elecciones legislativas de noviembre, debida en gran parte a la política del presidente George W. Bush en Irak.
Centenares de autobuses procedentes de todo el país transportaron a los manifestantes, que se reunieron por la tarde en la explanada situada frente al Capitolio. Además de Jane Fonda, otros oradores debían sucederse en la tribuna, como los actores Susan Sarandon y Danny Glover, el pastor Jessie Jackson, autoridades religiosas, militantes pacifistas, parlamentarios o ex combatientes.
