“Es fácil dispararle a este Papa, pero nadie tiene interés en hacerlo", aseguró Mehmet Alí Agca, responsable de un intento de homicidio sobre Juan Pablo II.
El terrorista turco, que pasó 19 años preso por disparar sobre el pontífice en 1981, sostuvo que "si alguien quisiese" dispararle al Papa Francisco "podría hacerlo muy fácilmente".
"Pero no le importa a nadie", espetó el mercenario turco. El papa Francisco es un simple párroco de provincia”, matizó. En diálogo con la italiana Radio 24, Agca aclaró que no tiene "ningún plan para asesinar al Papa". "Me gustaría dispararle al presidente Obama, sí. Estoy bromeando", remató.
El terrorista integró el grupo de extrema derecha turco Lobos Grises, con los que cometió varios crímenes en la década de 1970, por los que luego purgaría otros diez años de prisión. Pero se hizo mundialmente conocido por atentar contra la vida del Papa polaco el 13 de mayo de 1981. Juan Pablo II lo perdonaría dos años después, pero permaneció preso hasta 2006.
"Me encantaría volver a Italia para visitar la tumba del Papa polaco y conocer fraternalmente a Francisco, pero el gobierno italiano me ha impuesto una prohibición para volver a Italia", explicó Agca..