Una misa organizada en Santiago de Chile para pedir por la salud del ex dictador chileno Augusto Pinochet terminó con enfrentamientos verbales entre adherentes y opositores al gobierno de facto. Alrededor de 50 jóvenes se habían reunido frente a la catedral castrense para protestar contra la figura del general.
Augusto Pinochet Hiriart fue el único de los hijos del General que asistió a la misa, informó el diario chileno La Tercera. Con respecto a los incidentes que se registraron, el hijo de Pinochet dijo que “la gente está en su derecho a protestar”.
La ceremonia duró poco más de 30 minutos. Las revueltas comenzaron cuando a la salida un par de partidarios de Pinochet fueron a increpar a los manifestantes, ante lo cual la policía debió intervenir, indicó La Tercera.
Entre los manifestantes opositores se contaban el presidente de la Juventud Socialista Juan Pablo Pallamar.
Minutos antes de las 14 (hora local), Manoucheri decidió disolver la manifestación hasta un nuevo llamado por considerar que no estaban dadas las condiciones para mantenerla.
Pinochetistas y opositores se enfrentaron tras una misa por el dictador
A la salida de la ceremonia, que se realizó en la catedral castrense, hubo incidentes verbales entre adherentes y opositores al gobierno de facto. Augusto Pinochet Hiriart fue el único de los hijos del General que asistió a la misa.
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