Un prestigioso diario británico señaló que
tras el fracaso de sus anuncios en 2002, Brasil se asemeja más a una "economía sumergida
que a una potencia emergente”. Criticó la reforma laboral y la disciplina fiscal.
La prensa britnica dispar una bateria de crticas contra el presidente brasileo, Luis Incio Lula da Silva. |
Cedoc
Londres - El diario británico
Financial Times señaló que
el fracaso de los anuncios económicos del presidente de Brasil, Luiz Inácio
Lula da Silva, que prometió en 2002,
ubican a Brasil dentro de las economías "sumergidas" y no dentro de las denominadas
"emergentes".
Ha fallado en lograr el "crecimiento espectacular" que aventuró hace cinco años, por lo que
Brasil "ha quedado rezagado" detrás de otras potencias emergentes como China e India, opinó hoy el
Financial Times.
Brasil se asemeja más a una "economía sumergida" que a una potencia emergente, resumió el
analista brasileño Ricardo Amorim, citado por el diario de negocios.
En una entrevista con el
FT,
el ministro de Hacienda brasileño,
Guido Mantega, defendió el nuevo plan de Lula, cuyas prioridades son fuertes
inversiones en carreteras, puertos y otras infraestructuras, gastos en el sector de generación de
energía, en agua y salud.
En la entrevista, Mantega recalcó que estas inversiones "van a movilizar la industria de la
construcción, que estuvo paralizada durante varios años", señalando asimismo que el gobierno está
también promoviendo el sector de la vivienda.
"Y esto puede dinamizar la economía", afirmó el titular de Hacienda, que recalcó que Brasil,
que "tiene controlada la inflación, atrae las inversiones extranjeras".
Pero para el
FT, Brasil se enfrenta a varias barreras para seguir creciendo, que no se limitan a las
inversiones. El diario señala, entre otros obstáculos,
leyes laborales restrictivas que han forzado a alrededor de un 60% de la fuerza de
trabajo del sector informal, lo que ha tenido como resultado una reducción de los ingresos
públicos.
Mantega destacó en la entrevista que el gobierno está consciente que debe eliminar los
obstáculos burocráticos al crecimiento, y llamó la atención sobre medidas recientes como una ley
para las pequeñas y medianas empresas que simplifica el pago de impuestos.
El ministro se declaró también optimista sobre el impacto que puede ocasionar una planeada
reforma fiscal.
Pero el FT expresó sus reparos, subrayando que el gobierno
"parece estar perdiendo la disciplina fiscal que mantuvo durante el primer
mandato" de Lula, al decretar "generosos aumentos salariales a los empleados públicos" y
dando luz verde a "un incremento del salario mínimo muy por encima de la inflación".
Según el diario, las dudas más importantes respecto al segundo mandato de1 Lula conciernen
sus "prioridades verdaderas".
Lula "ha colocado el crecimiento en el centro del debate público. Pero ha manifestado
claramente que el crecimiento en sí no vale la pena", afirmó el diario.
El canciller Celso Amorim, destacó a su vez, en una entrevista con el FT, que "el crecimiento
en si mismo no nos interesa, si no está acompañado por la democracia y la justicia social".
