Mientras el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, pretende que Francia se convierta en el principal inversor del país, el gurú norteamericano de los negocios, Tom Peters, recomendó a las empresas españolas irse de dicho estado latinoamericano.
Peters manifestó en una entrevista con el medio español Expansión , que las amenazas de Chávez contra las empresas españolas es muestra suficiente de la falta de seguridad jurídica, garantía que exigen las compañías multinacionales para realizar inversiones.
"A primera vista, mi consejo al presidente de una firma española es que se vaya de Venezuela, aunque habría tantos países de los que largarse... como han hecho algunas compañías francesas en Irán", señaló Peters.
Al respecto, las empresas españolas seguramente optarán por continuar en Venezuela –ignorando las recomendaciones de Peters-, siempre que mantengan los mismos dividendos que obtuvieron en América Latina en los últimos casi 20 años.
Chávez quiere a Francia. Por su parte, el ministro de energía venezolano, Rafael Ramírez, expresó, según la agencia AFP, que el presidente de Venezuela quiere que el país galo sea el “primer inversor extranjero” en el país.
Ramírez manifestó estas declaraciones ante un grupo de representantes de empresas francesas nucleadas en la patronal MEDEF, al que no asistió el presidente Hugo Chávez, tal como se había anunciado en principio.
Actualmente Francia es el tercer inversor en Venezuela con 1.600 millones de dólares, por detrás de los Estados Unidos (7.850 millones de dólares) y España, quien posee inversiones por 2.800 millones de dólares.