La renuncia por "falta de fuerzas" de Joseph Ratzinger como Sumo Pontífice dispararon numerosas hipótesis. Una de ellas fue la falta de respaldo de los cardenales tras los casos de corrupción y acusaciones de pedofilia en la cúpula de la Iglesia Católica.
De hecho, en una recepción oficial de 2011 en Berlín -en su propio país- algunos cardenales alemanes habrían evitado darle la mano a Benedicto XVI, que parecía pasar de largo mientras eran presentados ante las cámaras. Ese video vuelve a dar la vuelta al mundo por Internet tras la asunción del papa Francisco.
El presunto desplante generó todo tipo de comentarios, incluso en la web Catholic Culture defendieron en ese momento a Ratzinger y señalaron que en esa presentación los cardenales no debían saludar al Papa de acuerdo al protocolo, aunque muchos de ellos sí lo hicieron.