El portavoz del Kremlin Dmitri Peskov, explicó que no entregaron los datos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) demandó para la aprobación de la vacuna Sputnik V porque tienen “normas diferentes”. “Hubo malos entendidos en la negociación”, detalló, pero destacó que finalmente están “adaptándose progresivamente a las exigencias” del organismo internacional.
“Aún no hemos proporcionado la información necesaria (a la OMS) porque teníamos una visión diferente de los datos que había que transmitir y de cómo había que proporcionarlos”, detalló Peskov y agregó: “Tenemos normas diferentes”.
La vacuna es utilizada en decenas de países, entre ellos, Argentina y su eficacia fue reconocida por la revista médica The Lancet, sin embargo, queda pendiente la aprobación oficial de la OMS y la Unión Europea.
Los propios ciudadanos rusos no están convencidos en vacunarse con la Sputnik V. “Los otros fabricantes de vacunas han logrado comprender lo que la OMS les pide para la certificación. Y sólo los nuestros no lo entienden”, dijeron con sarcasmo desde el Fondo de la Lucha contra la Corrupción (FBK) vía Twitter.
Allí no hay otras opciones de vacuna contra el Covid-19 y solo el 42,2% de su población recibió su dosis. A fines de octubre el número de muertes superaba los 520.000 por esta enfermedad.
RB cp