Moscú – El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, defendió hoy las pretensiones de su país sobre los recursos naturales del fondo marino del Polo Norte frente a las críticas internacionales, informó la agencia de noticias Interfax en Moscú.
La actual expedición en el Ártico, que el jueves colocó una bandera rusa de titanio inoxidable a 4.000 metros de profundidad en un gesto simbólico, busca pruebas científicas que demuestren que el fondo marino está unido a la tierra firme rusa.
Dinamarca, Estados Unidos, Noruega y Canadá, naciones que han señalado su interés en este territorio, criticaron la acción. Copenhague calificó la inmersión de "chiste sin importancia para los medios".
El ministro Lavrov rechazó las críticas y comentó: "Estoy muy asombrado, los descubridores siempre plantaron una bandera". Por primera vez en la historia de las expediciones polares, dos minisubmarinos rusos consiguieron alcanzar el fondo marino en el océano glacial.
Por su parte, el gobierno del presidente norteamericano George W. Bush criticó duramente la medida y calificó a Rusia por sus ambiciones territoriales. Es que desde 2001 Rusia reclama una gran parte del Ártico. Naciones Unidas no prevé de momento tomar una decisión sobre estos reclamos.
Fuente: DPA