El servicio de seguridad ruso afirmó este sábado que impidió los asesinatos, en territorio ruso e “instigados por los servicios especiales ucranianos” de dos mujeres de alto perfil público y mediático.
El FSB informó que el viernes detuvo en Moscú y en la región de Riazán a integrantes del grupo neonazi "Párrafo-88", al que considera una organización reclutada por los servicios ucranianos.
Según Moscú, les habían pagado para asesinar a Margarita Simonyan, una de las referentes del esquema mediático del Kremlin (es la directora del canal RT), y de Ksenia Sobchak, una influencer que fue candidata presidencial hace unos años y es conocida como la "Paris Hilton rusa".
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"El Servicio Federal de Seguridad, junto con el Comité de Investigación y el Ministerio del Interior de Rusia, impidió la preparación por parte de los servicios especiales ucranianos del asesinato de Margarita Simonyan, editora jefe del canal de televisión RT y la Agencia Internacional de Información Rossiya Segodnya.
Según los datos disponibles, también se preparaba el asesinato de Ksenia Sobchak", dice el comunicado oficial difundido en las últimas horas.
De acuerdo al FSB, los integrantes del grupo que perpetrarían los crímenes iban a hacerlo por "1,5 millones de rublos (unos 17.000 dólares) por cada asesinato". Los sospechosos confesaron sus intenciones, de acuerdo al comunicado oficial.
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Una de las mujeres que se salvó, de acuerdo a lo informado por el Kremlin, es Ksenia Sobchak, hija de Anatoli Sobchak, que entre 1991 y 1996 ejerció como primer alcalde de San Petersburgo. Su compañero de fórmula era Vladimir Putin, que ejercía como vicealcalde y era una figura que entonces no tenía el nivel de conocimiento que tiene desde hace algunos años.
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Sobchak es la editora de la revista L'Officiel y trabaja como conductora en el canal de TV Rain, además de tener su propio canal de YouTube. En Rusia es una de las celebridades más conocidas y gana, de acuerdo a la revista Forbes, 2,1 millones de dólares por año.
Hay que recordar que en 2018 se postuló como candidata a presidenta de Rusia. Fue un fenómeno llamativo porque durante la campaña buscó mostrarse crítica del presidente y de la situación del país, los opositores al Kremlin sostenían que en realidad el que estaba atrás de esa candidatura era el propio Putin, a modo de estrategia.
Simonyan, en tanto, es una de las mujeres más poderosas del aparato de difusión del Kremlin. Comenzó su carrera en medios financiados y controlados por el Gobierno ruso en el año 2001, fue periodista de la Compañía Estatal de Televisión y Radio Rusa (VGTRK) hasta el 2005. Ese año comenzó a trabajar como redactora jefa de Russia Today, que pasó a llamarse RT.
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En la actualidad tiene presencia en muchos medios, pero su actividad principal está asociada a la difusión de los contenidos del Kremlin y la propaganda de Putin, de acuerdo a medios rusos.
LT
