Berlín - El subsecretario de Asuntos Hemisféricos del Departamento de Estado norteamericano, Thomas A. Shannon, rechazó la acusación de que los Estados Unidos haya olvidado a su antiguo "patio trasero" América Latina en los años de la administración Bush, según una entrevista que hoy publica el diario berlinés Tagesspiegel.
"Nunca perdimos de vista a América Latina. A pesar del 11-S, a pesar de las guerras de Afganistán e Irak", afirmó Shannon dos semanas después de la octava visita de George W. Bush a la región.
"Ningún presidente en la historia de los Estados Unidos visitó más frecuentemente América Latina", agregó el funcionario de 49 años durante una entrevista en Berlín. Aseguró que Estados Unidos duplicó la ayuda financiera a América Latina y cerró acuerdos de libre comercio con países "que representan dos tercios del producto nacional bruto sudamericano".
En todo caso, "no es Estados Unidos, sino el resto del mundo el que olvidó al continente" ya que, según Shannon, actualmente hay "muchos desafíos muy importantes" que "se disputan nuestra atención". "La Unión Europea (UE) está ocupada con la construcción de la UE, Asia tiene suficiente con la China cada vez más fuerte", dijo.
De todas formas, aseguró que América Latina experimentó en los últimos años una evolución "realmente dinámica y positiva". "Las democracias se consolidan, y son más abiertas para más participación, también de grupos y personas que habían estado históricamente excluidos, como los indígenas, los afrolatinos y los extremadamente pobres".
Agregó que esto también es válido para Venezuela, donde gobierna el rival de Bush, Hugo Chávez: "Hugo Chávez goza de amplio apoyo en Venezuela, así como Evo Morales en Bolivia.
Ambos reflejan algo de aquello que antes, en los sistemas políticos de sus países era percibido por muchos como insuficientemente representativo e incapaz de satisfacer las necesidades de la población", dijo Shannon. Aseguró que Estados Unidos no tiene "reservas ideológicas" en la relación con los países de la región.
"No es importante si un país es de izquierda, de centro o de derecha. Lo fundamental es: ¿Es democrático? ¿Tenemos la misma visión sobre una economía en funcionamiento? ¿Y el país tiene interés en ser nuestro socio?".
Destacó que no hay un enfrentamiento entre Estados Unidos y Venezuela, sino diferencias en la forma de abordar el tema desarrollo.
"Nuestro camino no sólo es estimado correcto por nosotros, sino por la mayoría de los países de la región", explicó Shannon. Subrayó que la visión de Chávez es una vuelta a la política de los años 60: "Un gobierno político autoritario centralizado, una economía dirigida centralmente, un gran sector público, poca industria y servicios. Eso puede funcionar en Venezuela, debido a sus propias características, sobre todo las ricas reservas petroleras. Pero sólo pocos países de la región comparten esas características".
Al final ocurrirá que "que la competencia no se resolverá ideológicamente, sino mediante los resultados que se producen, y muy pronto. Y confiamos en que se demostrará el éxito de nuestro principio cuando se trata de desarrollo social y económico".
Fuente: DPA