CHICAGO - Un soldado de los Estados Unidos que estuvo en Irak se declaró culpable de violar y asesinar a una niña iraquí y de ejecutar a su familia. Así lo declaró este jueves su abogado William Cassara.
Cassara afirmó que el sargento Paul Cortez, de 24 años, se declaró culpable de haber participado en la matanza el 12 de marzo de 2006, en Mahmudiya, Irak, y añadió que su cliente ahora evitará la pena de muerte.
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AFP.