Al menos 39 personas murieron y 150 resultaron heridas hoy en un atentado terrorista en un centro comercial de Nairobi. Un comando armado y encapuchado entró en el centro comercial Westgate Mall, uno de los más lujosos de Nairobi, cuya clientela está formada principalmente por kenianos ricos y por extranjeros. Los miembros del comando dispararon y tiraron granadas contra la clientela y los empleados del centro comercial.
Unidades de élite del ejército keniano fueron desplegadas para reforzar a las fuerzas policiales en el lugar y ayuda a la evacuación de los clientes y los empleados del centro comercial que era sobrevolado por helicópteros. Según trascendió, mantenían rehenes durante las primeras horas del ataque.
"Kenia ya ha sufrido ataques terroristas antes, y volverá a derrotar" a quienes los cometen, advirtió el presidente de ese país, Uhuru Kenyatta. Según consignan medios internacionales, el jefe de Estado habría perdido familiares en el atentado.
Este tipo de embate es algo que nunca había ocurrido en la capital keniana y podría ser el atentado más sangriento desde el ataque suicida de Al Qaeda, que tuvo como objetivo en agosto de 1998 la embajada estadounidense de Nairobi y causó más de 200 muertos.
Responsables. Los militantes islamistas shebab de Somalia reivindicaron la matanza, en represalia a la presencia de tropas de Kenia en territorio somalí.
"Los muyahidines entraron en el centro comercial Westgate hacia el mediodía" y "mataron a más de 100 infieles kenianos y la batalla continúa", afirmaron los islamistas en un mensaje difundido por Twitter.
"Lo que los kenianos ven en Westgate es la justicia punitiva de los crímenes cometidos por sus soldados" involucrados en el conflicto somalí, afirmaron los shebab, vinculados a Al Qaeda.
"Por tierra, por aire y por mar, las fuerzas kenianas invadieron nuestra patria musulmana, matando centenas de musulmanes en esas operaciones y desplazando miles" de personas, agregó el mensaje de los islamistas somalíes, según indicó la agencia francesa AFP.
El ejército de Kenia ingresó en Somalia en 2011 y, desde entonces, mantiene cierto nivel de presencia en el sur del país, a modo de sostén del gobierno somalí en su lucha contra los shebab.
Condena. El gobierno argentino condenó "el bárbaro atentado" y envió sus condolencias al gobierno de Kenia. Según el parte, no hay registros de argentinos residentes entre las víctimas de la matanza.
"La cancillería argentina condena el bárbaro atentado a un centro comercial en Nairobi, capital de Kenia", señaló el comunicado del Ministerio de Relacioens Exteriores y Culto.
Por su parte, la Casa Blanca calificó de "despreciable" el ataque, al tiempo que prometió ayuda a Kenia en sus esfuerzos contra el terrorismo.
"Los autores de este acto inhumano deben ser llevados ante la justicia, y hemos ofrecido nuestro apoyo total al gobierno de Kenia para lograrlo", dijo la portavoz del Consejo Nacional de Seguridad estadounidense, Caitlin Hayden, en un comunicado.