Argentina no es el único país afectado por la crisis agropecuaria. En India, la combinación de sequía, endeudamiento, y la crisis financiera internacional llevaron a 1.500 campesinos a suicidarse tras una mala cosecha.
El estado rural de Chattisgarh se vio afectado por una enorme caída de los niveles de agua. "El nivel de agua cayó a 75 metros, la mayoría de los granjeros está endeudado y sólo dios puede salvar a los que no tienen un pozo de agua", según explicó Shatrughan Sahu, un aldeano, al diario pakistaní Daily Times.
Mucha gente sobrevive gracias a los cultivos estacionales en estas provincias rurales, pero la caída del nivel de agua y la sequía ha disminuído las cosechas, lo que aumenta el temor de que haya más suicidios entre la población.
Sólo en el distrito de Chattisgarh, unos 206 campesinos se quitaron la vida el año pasado. En la década pasada, India registró más de 10.000 suicidios de ruralistas en todo el país. El gobierno condonó sus deudas por 15.000 millones de dólares, pero el problema persiste porque muchos tomaron dinero de prestamistas privados.
Hay quienes creen que ahí está la causa del problema. "Los suicidios de los granjeros aumentan por un círculo vicioso creado por los prestamistas: engañan a los productores para pedir dinero prestado, pero cuando las cosechas fracasan, no les queda otra opción que la muerte", explicó Bharatendu Prakash, vocero de la Asociación de Agricultura Orgánica (Organic Farming Association, su sigla en inglés).