Ocho personas resultaron heridas este jueves, tres de ellas por perdigones, cuando un joven disparó en un instituto de la ciudad francesa de Grasse, ubicada al sur del país cerca de las ciudades de Cannes y Niza. Las autoridades descartaron que se tratara de un acto "terrorista".
El sospechoso, un alumno del establecimiento de 17 años, armado con un fusil, dos armas cortas y dos granadas, fue detenido tras el incidente que se produjo en la escuela secundaria Tocqueville, dijo a la AFP una fuente judicial, que pidió no ser identificada. No se determinó todavía si actuó solo o con un cómplice.
El sospechoso podría sufrir "problemas psicológicos", según el presidente de la región, Christian Estrosi. Un comunicado del ayuntamiento de Grasse había indicado que "dos alumnos dispararon contra el director". Este último y dos estudiantes sufrieron heridas leves y un tercero una "fuerte conmoción", añadió Estrosi.
Como medida de seguridad, las autoridades ordenaron el cierre de todos los centros escolares de esta localidad, conocida por sus perfumes, confinando en su interior a alumnos, profesores y empleados, según fuentes locales. Funcionarios locales dijeron que varios alumnos huyeron y buscaron refugio en un supermercado cercano "lo que creó un pánico y rumores de un ataque".
"A los otros alumnos se les ha pedido que se queden en la escuela y estén tranquilos", dijeron las autoridades locales. El rector de Niza, Emmanuel Ethis, instó a los padres a que no vayan a buscar a sus hijos a los colegios, asegurando que "los alumnos están seguros".
Francia se encuentra en estado de emergencia tras una ola de atentados yihadistas que dejó 238 muertos desde el 7 de enero de 2015. En este caso, sin embargo, la investigación no se orienta hacia la hipótesis terrorista.
El tiroteo ocurrió solo horas después de que una carta bomba explotara en las oficinas del Fondo Monetario Internacional (FMI) en París, hiriendo a una secretaria que sufrió quemaduras en las manos y la cara.
