Una rehén surcoreana se sacrificó por otra

Seul - Una mujer perteneciente al grupo de 19 rehenes surcoreanos secuestrados en Afganistán por los talibanes renunció a ser liberada para que otra mujer fuera soltada en su lugar, indicaron ayer las dos rehenes liberadas.

Kim Gi-Na y Kim Kyung-Ja hicieron la revelación en una entrevista con Al Yazira desde el hospital militar en el que permanecen desde que volvieron a Seúl el 17 de agosto.

Lee Ji-Young, en un acto de sacrificio, se manifestó voluntaria para permanecer en cautiverio porque tiene más experiencia en Afganistán, dijeron ambas mujeres en la entrevista, emitida ayer por la tarde en Corea del Sur.

"Los talibanes permitieron sin embargo a Ji-Young escribir una carta a su familia, en la que la consoló y le dio esperanzas de que volvería algún día", dijo Gi-Na.

Ji-Young había estado trabajando como voluntaria en Afganistán desde diciembre, y también era la guía de los voluntarios evangelistas surcoreanos que llegaron al país en julio.

"No se preocupen por mí porque estoy muy bien y como bien", decía la carta dirigida por Lee Ji-Young a su familia, según informaciones locales de prensa.

Las dos mujeres dijeron además que no habían sido maltratadas por los talibanes y que estos les daban " cosas básicas como comida, medicación y algunas mantas".

El gobierno surcoreano ha mantenido lejos de la prensa a las dos mujeres evangelistas liberadas por los talibanes desde que volvieron, y ésta era su primera entrevista.

Los talibanes capturaron a 23 evangelistas surcoreanos el 19 de julio cuando viajaban en autocar en el sur de Afganistán.

Los insurgentes, que piden la liberación de varios de sus correligionarios a cambio de los rehenes surcoreanos, mataron a dos de estos rehenes para presionar. El gobierno de Kabul se niega obstinadamente a satisfacer las exigencias de los talibanes.

Fuente: AFP