La grieta llegó a Estados Unidos para quedarse. La asunción del flamante presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se convirtió en el día y escenario preciso para que pro y anti Trump se cruzaran cara a cara.
Los fanáticos de uno y otro lado de la grieta se cruzaron en las calles de Washington. En las gélidas calles de Estados Unidos los manifestantes le pusieron calor con cánticos contra el nuevo Presidente: "USA, no rapist, no KKK, no Trump" (Estados Unidos, no violadores, no Ku Klux Klan, no Trump), aludiendo a las denuncias de violación que saltaron en plena campaña contra Trump y también a los miembros del Gabinete ligados a la supremacía blanca.
Del otro lado, los seguidores de Trump no se quedaron atrás y respondieron sin altavoces: "Nanana, hey hey, Goodbye".
Trump supporters face-off against anti-trump protesters pic.twitter.com/SUbFr2QwzK
— Jessica Naudziunas (@jnaudz) 20 de enero de 2017