"Voy a empezar a vivir. Es el día más feliz de mi vida, después de tres años. Es un volver a empezar, repara todo", dijo la víctima Vanessa Rial mientras saludaba y abrazaba al presidente del Tribunal Oral. El sentenciado a 37 años de prisión Jorge Martínez Poch optó por no ocultar su esencia y dedicarle a las víctimas gestos obscenos.
Rial, que saltó de su asiento cuando escuchó la condena a 37 años de prisión, explicó que durante la audiencia prefirió no mirar a Martínez Poch, y dijo que el acusado quiso provocar a sus amigas que se hallaban dentro de la sala "guiñándole el ojo o sonriendo".
Luego de que el Tribunal leyera la sentencia, Martínez Poch, con una sonrisa en la boca, se llevó un dedo a la boca y le hizo fuck you mirando directo a sus víctimas. Los policías, que lo custiodaban, lo reprendieron y se justificó: "Me estaba apuntando".
